“Piso parejo” para todos los aspirantes pide A. Gaspar a la dirigencia del PRD

Con miras a las elecciones del siete de junio próximo, los elementos clave que el Partido de la Revolución Democrática (PRD) tiene que ponderar en el proceso de designación de sus candidatos a gobernador, presidentes municipales y diputados locales son la unidad, certeza, imparcialidad y

honestidad. En esos términos se pronunció ayer el diputado local perredista Antonio Gaspar Beltrán quien consideró que sólo de esta manera logrará el partido del sol azteca conservar la gubernatura del estado y la mayoría de los Ayuntamientos y distritos electorales locales. Gaspar Beltrán, quien aspira a ser el candidato del PRD a la Presidencia Municipal de Chilpancingo fue enfático al señalar que a los cargos de elección popular “deben de ir los mejores, los que garanticen certeza al partido y confianza a la ciudadanía”. Señaló que un factor determinante para el PRD en este proceso electoral es la unidad, eso “es un factor determinante para nuestro partido, para nuestra militancia y simpatizantes, la unidad que dé paso a la certeza como instituto político que quiere hacer un papel que vaya más allá de lo decoroso, con propuestas, con seriedad, rectitud y con sus mejores candidatos En el proceso de designación de los candidatos, el diputado local pidió a las dirigencias estatal y nacional del PRD a “garantizar el piso parejo para todos los aspirantes, que no haya ni presiones, ni amiguismos y mucho menos actitudes que tiendan a dividir al partido, porque la división sería el peor de los escenarios para nuestro partido. Y remarcó: “por eso mi reiterado llamado a que se valoren las propuestas, que se analice bien a los cuadros que aspiran a participar en esta elección y que no se prioricen solamente el apellido o los recursos económicos, al contrario, es la transparencia, el trabajo político, el acercamiento social y la honestidad los factores que deben de ser lo más importante en la toma de decisiones”. Finalmente mencionó que la honestidad debe ser una característica obligatoria para todos los aspirantes, no sólo del PRD, ante una sociedad más vigilante y exigente. (Baltazar Jiménez Rosales)