Mochitlán y Quechultenango exigen retiro de comunitarios en Petaquillas

Habitantes de los municipios de Mochitlán y Quechultenango, se manifestaron en Chilpancingo para exigir la salida de la policía comunitaria de Petaquillas, bajo el argumento de que su presencia está ahuyentando al poco turismo que visitaba los balnearios del Río Azul, debido a que a todo mundo
interceptan para revisarlo cual delincuente, además que les exigen cooperación “voluntaria”.
La manifestación inició en la cabecera municipal de Quechultenango donde a las 8 de la mañana empezaron a reunirse, mientras que en Petaquillas el anuncio de la movilización causó un estado de alerta en el que se hizo repicar las campanas para llamar al pueblo a concentrarse en la plaza principal y esperar a quienes repudian a su policía comunitaria.
Los habitantes de Petaquillas se trasladaron después a la carretera y cuando el convoy de más de cien vehículos pasó frente a ellos desplegaron pancartas en las que indicaban que Petaquillas no se rinde y que unidos jamás serán vencidos.
El convoy de manifestantes estuvo custodiado por patrullas de la Policía Municipal de Mochitlán, ya que el propio alcalde de ese municipio Severo Espíritu Valenzo, encabezó los contingentes.
Las patrullas fueron interceptadas por la población de Petaquillas que les exigió identificarse para corroborar que se trataba de elementos policiacos y no delincuentes disfrazados.
Los habitantes de Petaquillas resaltaron que las patrullas transitaban sin placas y sólo una unidad portaba una pero de un vehículo registrado en el estado de México, lo que sin lugar a dudas representaba una mayor irregularidad, puesto que las patrullas de la policía normalmente se adquieren nuevas y no a algún particular de la vecina entidad.
Finalmente policías y manifestantes pudieron pasar la comunidad de Petaquillas para realizar su manifestación en esta capital donde marcharon desde el punto conocido como Parador del Marqués hasta el palacio de gobierno avanzando por los carriles centrales del bulevar Vicente Guerrero.
En la explanada del palacio los manifestantes realizaron un mitin en el que se llamó al gobernador del Estado a recibir una comisión para que le expusieran la demanda de su movimiento que es únicamente que se retiren a los comunitarios.
Mientras eso ocurría desde camionetas de redilas se bajaron decenas de cajas con tortas, refrescos y botellas de agua que se repartieron entre toda la concurrencia.
Del interior del palacio de gobierno salieron funcionarios menores de la Secretaría General de Gobierno quienes ofrecieron establecer una mesa de diálogo con los manifestantes para atender la demanda.
El grupo de funcionarios estuvo encabezado por el director de Transportes en el estado Juan Larequi Radilla, debido a que los manifestantes usaron alrededor de cien unidades de servicio público tipo Urvan, mismas que se estacionaron afuera del palacio de gobierno y por ello “pensó” que la protesta era de transportistas.
Los manifestantes entraron a la reunión en la Secretaría General de Gobierno y una vez que sus demandas fueron escuchadas se trasladaron a la Fiscalía General del Estado donde entregaron también un documento, en el que además del retiro de la policía comunitaria de Petaquillas exigieron que el Ejército vigile las comunidades del circuito Río Azul.
Los quejosos acusaron a los comunitarios de Petaquillas de detener a personas de manera Ilegal y fundarles acusaciones sin tener evidencias, además de que interceptan a los vehículos, los revisan de manera ilegal y a sus ocupantes les exigen “cooperar” para su movimiento.
Una vez que entregaron su documento en la Fiscalía General del Estado, los manifestantes iniciaron el camino de regreso a sus pueblos en Mochitlán y Quechultenango, y entre quienes evidentemente dirigían algunos grupos se reiteró que si el gobierno no les hace caso recurrirán a “otros métodos” para hacer que los comunitarios de Petaquillas, no les sigan causando molestias.
Cuando los habitantes de Quechultenango y Mochitlán se retiraron hacia sus pueblos se volvieron a encontrar con los de Petaquillas y un nutrido grupo de reporteros y con estos últimos iniciaron un conato de enfrentamiento en el que hubo empujones, insultos y uno que otro golpe, después de ello los que vinieron a protestar siguieron su camino.
Esta acción encendió la alerta en los pueblos del Valle de El Ocotito de donde salieron decenas de camionetas con integrantes del FUSDEG para reforzar a los comunitarios de Petaquillas pero cuando llegaron todo había regresado a la normalidad. (Por Abel Miranda Ayala)

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