Padres se atrincheran en un jardín de niños por amenaza de radicales

*Estarán vigilantes que nada pase a sus hijos, ni al personal que responsablemente ha estado atendiendo las labores educativas.

Por Abel Miranda Ayala 

Padres de familia del Jardín de Niños “Luz Velazco Estrada”, que se localiza en la colonia San Juan de esta capital instalaron guardias de vigilancia para impedir que “encapuchados”, puedan hacer efectiva una amenaza de desalojar al personal a quienes exigen sumarse al paro de labores indefinido.
De acuerdo con personal de intendencia, la mañana del pasado lunes, en esta institución se dejó un mensaje escrito en una hoja de cuaderno en el que se indica que el personal debe desalojar el plantel de lo contrario deberán atenerse a las consecuencias, por ello se suspendieron labores el lunes y este martes se reiniciaron actividades con una amplia presencia de padres de familia.
Los padres indicaron que estarán vigilantes que nada pase a sus hijos, ni al personal que responsablemente ha estado atendiendo las labores educativas, “asimismo destacaron que mantendrán una vigilancia permanente y se ha generado un listado de teléfonos para que se les llame en caso de ser necesario y acudan de inmediato a resguardar a los menores.
“No se vale este tipo de terrorismo que están haciendo, porque los niños no tiene la culpa de nada y tiene derecho a recibir educación, además sabemos que la formación en los primeros años de vida es crucial para el desarrollo de los niños y no podemos dejar que los niños pierdan la oportunidad de recibirla”.
Por su parte la maestra Judith Cuevas Castro, directora del plantel informó que el anónimo estaba elaborado a mano y textualmente decía:
“TIENEN HASTA LAS 9 AM PARA DESALOJAR EL JARDIN. ATENGACE A LAS SCONSECUENCIAS”, por lo que de inmediato decidió comunicárselo con los profesores y después se les habló a los padres de familia para que vinieran por sus hijos y se los llevaran de manera tranquila y ordenada”.
Señaló que también se tuvo comunicación telefónica con el director de Gobernación en el estado, Moisés Alcaraz, quien prometió enviar dos patrullas para que vigilaran la escuela, pero nunca llegaron, por lo que las clases se retomaron de manera normal, aunque, sí entre un ambiente de tensión y miedo.
Al cuestionarle si consideraba que esta acción pudiera venir por parte de los maestros del magisterio disidente integrados a la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación de Guerrero (CETEG) o bien, de los alumnos de la Normal Rural “Isidro Burgos” de Ayotzinapa, la profesora y directora del Jardín de Niños Luz Velazco Estrada, comentó que a ella no le constaba eso, por lo que el asunto quedaría únicamente como un aviso anónimo que, hasta el momento no ha pasado a mayores.

LA CETEG SE DESLINDA: 

En tanto que la dirigencia de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la educación, se deslindó de ese anónimo y culpó al gobierno de estar implementando una política de confusión, que genere un enfrentamiento del pueblo con el pueblo. Manuel Salvador Rosas Zúñiga, quien es integrante de la Comisión Política de la CETEG, acusó al gobierno de pretender “satanizar al movimiento, de generar odio hacia los maestros y hacia la normal de Ayotzinapa, para que se olvide que en Iguala desaparecieron 43 jóvenes y que hasta este momento no ha clarificado que pasó con ellos”.
“Esta parte de la película la vivimos hace un año y medio, justo en el movimiento del 2013, donde nos quedó claro que estos hechos son muestra clara que los crea el estado para difundir a la opinión pública, porque en aquella ocasión cerraron escuelas primarias, secundarias, lanzaron amenazas por las redes sociales, fomentando que eran los maestros de la CETEG los que estaban cerrando las escuelas, pero eso fue una mentira y una situación creada para debilitar a nuestro movimiento magisterial”, a pesar de ello dijo que el movimiento no se detiene, y por el contrario habrá de tomar nuevos causes en los próximos días con los que se mantiene la postura de que no se permitirá el desarrollo del proceso electoral en Guerrero.