Lucran alcalde de Quechu y su hermano con el Programa “Piso Firme”: B. Ortega

El presidente municipal de Quechultenango, Antonio Navarrete Cortés, y su hermano Adrián de los mismos apellidos, fueron acusados ante el presidente de la Comisión de Gobierno del Congreso local, Bernardo Ortega Jiménez, de lucrar con los beneficios del programa “Piso Firme” de la Secretaría de
Desarrollo Social federal.
Por tal motivo, el también coordinador de la bancada del Partido de la Revolución Democrática (PRD), se comprometió con los denunciantes a que en la sesión legislativa de hoy —martes— presentará un punto de acuerdo a través del cual exhortará al alcalde de Quechultenango a no utilizar los beneficios de tan noble programa para su provecho personal y familiar.
Explicó que a través del programa “Piso Firme”, la Secretaría de Desarrollo Social federal apoya a las familias de escasos recursos económicos con cemento y otros materiales para ponerle el piso a sus viviendas, pero además paga la mano de obra sin que los beneficiarios tengan que erogar dinero alguno pues se supone que se encuentran en situación de pobreza.
Sin embargo, dijo, en su visita a Quechultenango, particularmente a las colonias La Libertad e Insurgentes, muchas familias se le acercaron para denunciar la irregularidad en que incurre el alcalde Antonio Navarrete Cortés en complicidad de su hermano Adrián.
Dijeron que si bien el alcalde les da el cemento para ponerle el piso firme a sus viviendas obliga a las familias beneficiadas a pagar cerca de mil 200 pesos para el pago de los albañiles y peones además de que los obliga a darles las comidas durante el tiempo en que se encuentren trabajando.
El problema es que no se sabe a dónde realmente va a parar el dinero que cobra supuestamente para el pago de los albañiles y peones.
Y como la acción en que ha incurrido el alcalde y su hermano está fuera de toda norma, ya que “están haciendo negocio con el programa “Piso Firme” que es muy noble pero ellos lo están pervirtiendo”, Ortega Jiménez se comprometió a incluir un punto de acuerdo en la sesión legislativa de hoy en el Congreso del Estado para exhortarlo a que deje de lucrar con tales beneficios.
Ortega Jiménez enfatizó que las familias de Quechultenango que le hicieron tal denuncia están realmente indignadas con justa razón en contra del alcalde, porque “no es justo que siendo inversión federal, el presidente municipal obligue a las familias pobres a pagar 150 pesos a cada uno de los integrantes de una cuadrilla de 8 trabajadores entre peones y albañiles, y además les den almuerzo y comida, porque se entiende que ese gasto está presupuestado y es absorbido por el gobierno, con lo que alguien está haciendo negocio”. (Baltazar Jiménez Rosales)

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