Intercambian empujones e insultos federales y el FDP, en Palo Blanco
En la toma de la caseta de Palo Blanco correspondiente a la jornada de ayer, dirigentes del Frente de Defensa Popular (FDP) discutieron con elementos de la Policía Federal que los conminaron a retirarse, lo que generó un conato de confrontación en el que hubo empujones e insultos de ambas
partes, aunque por fortuna las cosas no pasaron a mayores.
Los miembros del FDP, llegaron a la caseta alrededor de las ocho de la mañana y casi a las doce del día cinco patrullas de la Policía Federal, con dos elementos cada una llegaron y se acercaron a dialogar con los manifestantes, para informarles que la toma de la caseta es un delito, por lo que si no la liberaban serían detenidos.
Los dirigentes del FDP respondieron con agresiones, culparon a los policías de ser los responsables de la desaparición de los alumnos de la Escuela Normal de Ayotzinapa y les respondieron que no se irían, que en todo caso procedieran a utilizar “la fuerza represiva del estado” en contra de campesinos e indígenas que apoyan a los padres de los desaparecidos, Los campesinos, encabezados por Efraín Torres Fierro, se abalanzaron en contra de los federales a quienes empujaron e incluso le tiraron los lentes a quien parecía comandar al grupo.
Después de este conato de violencia, para evitar una confrontación mayor, los miembros del FDP decidieron retirarse, pues además tenían programado concluir su actividad a las 12 del día y para eso ya faltaban 15 minutos.
Después de las 12 del día a la caseta de Palo Blanco llegó una comisión de padres de los desaparecidos, acompañados por alumnos de la Normal de Ayotzinapa y presuntos estudiantes de la UNAM, que son identificados como el grupo de jóvenes anarquistas.
Ellos tomaron nuevamente la caseta y por varias horas estuvieron dando el paso libre a los automovilistas a cambio de una cooperación voluntaria.
De acuerdo a un conteo rápido que se realizó durante un minuto, por la caseta pasaron aproximadamente 35 vehículos rumbo al puerto de Acapulco y 30 con rumbo a Chilpancingo para un total de 65 automóviles, lo que habría dejado una importante cantidad de recursos económicos a quienes realizaron el cobro. (Abel Miranda Ayala)
partes, aunque por fortuna las cosas no pasaron a mayores.
Los miembros del FDP, llegaron a la caseta alrededor de las ocho de la mañana y casi a las doce del día cinco patrullas de la Policía Federal, con dos elementos cada una llegaron y se acercaron a dialogar con los manifestantes, para informarles que la toma de la caseta es un delito, por lo que si no la liberaban serían detenidos.
Los dirigentes del FDP respondieron con agresiones, culparon a los policías de ser los responsables de la desaparición de los alumnos de la Escuela Normal de Ayotzinapa y les respondieron que no se irían, que en todo caso procedieran a utilizar “la fuerza represiva del estado” en contra de campesinos e indígenas que apoyan a los padres de los desaparecidos, Los campesinos, encabezados por Efraín Torres Fierro, se abalanzaron en contra de los federales a quienes empujaron e incluso le tiraron los lentes a quien parecía comandar al grupo.
Después de este conato de violencia, para evitar una confrontación mayor, los miembros del FDP decidieron retirarse, pues además tenían programado concluir su actividad a las 12 del día y para eso ya faltaban 15 minutos.
Después de las 12 del día a la caseta de Palo Blanco llegó una comisión de padres de los desaparecidos, acompañados por alumnos de la Normal de Ayotzinapa y presuntos estudiantes de la UNAM, que son identificados como el grupo de jóvenes anarquistas.
Ellos tomaron nuevamente la caseta y por varias horas estuvieron dando el paso libre a los automovilistas a cambio de una cooperación voluntaria.
De acuerdo a un conteo rápido que se realizó durante un minuto, por la caseta pasaron aproximadamente 35 vehículos rumbo al puerto de Acapulco y 30 con rumbo a Chilpancingo para un total de 65 automóviles, lo que habría dejado una importante cantidad de recursos económicos a quienes realizaron el cobro. (Abel Miranda Ayala)
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