Condena B. Ortega reiterados ataques al Congreso y se deslinda de sus hermanos

Después de condenar los reiterados ataques de normalistas y maestros de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación (CETEG) a la sede del Poder Legislativo, el presidente de la Comisión de Gobierno del Congreso local, Bernardo Ortega Jiménez, dijo estar abierto a una investigación por
parte de la Procuraduría General de la República (PGR) por los señalamientos que se hacen en su contra acerca de sus presuntos vínculos con la delincuencia organizada.
En primer término en cuanto a los ataques de los normalistas y maestros de la CETEG en contra de la sede del Congreso local, señaló que a manera de protesta por el asesinato de tres normalistas y la desaparición de 43 estudiantes de la Normal de Ayotzinapa, son tres las ocasiones en que los manifestantes han apedreado los ventanales de la sede del Poder Legislativo, en la segunda de las cuales incluso fueron incendiados cinco vehículos y el propio recinto legislativo.
Al respecto, lamentó que los grupos inconformes atenten en contra de instalaciones públicas que son construidas y equipadas con dinero del pueblo porque provienen del pago de impuestos.
Y es que en las marchas que realizaron los días lunes y martes de esta semana por el bulevar “Vicente Guerrero”, los normalistas y profesores disidentes atacaron de nueva cuenta a pedradas la sede del Congreso local y destruyeron los pocos ventanales que en las anteriores irrupciones no habían sido alcanzados por las piedras.

Se deslinda de sus hermanos 

En otro orden de ideas, cuestionado respecto a su presunta relación con la delincuencia organizada, el también coordinador de la Fracción Parlamentaria del Partido de la Revolución Democrática (PRD) dijo estar dispuesto a ser investigado por la PGR y además se deslindó abiertamente de sus hermanos Celso y Antonio, a quienes se ubica como los principales líderes del grupo delictivo Los Ardillos, vinculados con los hechos de violencia registrados últimamente en Chilapa.
En este sentido, Ortega Jiménez apuntó: “afortunadamente soy un profesionista, estudie derecho y tengo una maestría en ciencias penales; conozco el derecho, litigue durante 10 años, y nadie me podrá decir que yo tengo vínculos con el crimen organizado”.
El ex presidente municipal de Quechultenango expresó categórico que desde el 2005 no tiene contacto con sus dos hermanos: “incluso mi vida corre peligro y hasta por ellos, porque ellos saben bien que yo no tengo ninguna comunicación con ellos, pueden revisar sus teléfonos, mis llamadas y mensajes Señaló que si la PGR quiere iniciar una investigación en su contra él será el primero en aceptarla, y a aquellos que dicen que se ampara en el fuero que tiene les recordó que el fuero es por delitos del orden común no federal, por lo que en el momento que lo determine, la Procuraduría podrá realizar las investigaciones y reiteró que cuando se lo indiquen acudirá a rendir cualquier tipo de declaraciones y aportar las pruebas que sean necesarias.
Respecto a la revisión de su teléfono celular, expresó finalmente: “me podrán encontrar mensajes de todo lo que quieran y me podrán acusar de todo, menos de corrupto, menos de criminal y menos de maricón”. (Baltazar Jiménez Rosales)