Más de seis millones de pesos costará reparación de daños a la sede del PRI
Poco más de seis millones de pesos costará en esta ocasión la reparación de los daños ocasionados a la sede del Comité Directivo Estatal del Partido Revolucionario Institucional (PRI) tras el ataque perpetrado la mañana del martes de esta semana por parte de normalistas de Ayotzinapa y maestros
de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación (CETEG).
“Otra vez nos dejaron sin nada, destrozaron todo, se quemaron prácticamente todas las oficinas lo que nos pone otra vez en una situación difícil”, expresó la dirigencia estatal del tricolor. Cabe recordar que esta es la segunda ocasión que la sede del PRI sufre un ataque de esta naturaleza. La primera vez fue el 25 de abril de 2013 cuando maestros cetegistas la incendiaron en protesta por la reforma educativa.
La reparación de esos daños, informó la dirigencia estatal del tricolor, costó más de 12 millones de pesos, mientras que ahora se requerirá una cifra superior a los seis millones de pesos, porque “otra vez nos dejaron sin nada, “Los daños sí son mayores, todavía no tenemos con exactitud la cantidad, porque es un tema que tendrán que valorar peritos de la Procuraduría y una vez que tengamos el resultado, lo daremos a conocer; pero si nos dejaron otra vez sin nada, destrozaron todo, se quemaron prácticamente todas las oficinas, entonces, ahora si sentimos que volvemos a estar en una situación difícil en torno nuestras oficinas del PRI”, indicó.
La situación se torna más complicada porque el Comité Directivo Estatal del tricolor todavía le debe a la empresa que llevó a cabo la reparación de los daños ocasionados ese 25 de abril de 2013.
Aparte de los daños a la infraestructura, los dirigentes del PRI lamentan las pérdidas de la documentación que había en las oficinas, sobre todo porque el instituto político estaba en temporada de afiliación.
Señaló que las áreas que más daño sufrieron en esta ocasión fueron la de Finanzas y la de Organización.
La dirigencia estatal del PRI pugnó porque los gobiernos estatal y federal ya tiendan los canales de comunicación con los dirigentes del movimiento para poder darle a la población en general, a las organizaciones, a las empresas y a los partidos políticos las garantías de seguridad y protección que necesita. (Baltazar Jiménez Rosales)
de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación (CETEG).
“Otra vez nos dejaron sin nada, destrozaron todo, se quemaron prácticamente todas las oficinas lo que nos pone otra vez en una situación difícil”, expresó la dirigencia estatal del tricolor. Cabe recordar que esta es la segunda ocasión que la sede del PRI sufre un ataque de esta naturaleza. La primera vez fue el 25 de abril de 2013 cuando maestros cetegistas la incendiaron en protesta por la reforma educativa.
La reparación de esos daños, informó la dirigencia estatal del tricolor, costó más de 12 millones de pesos, mientras que ahora se requerirá una cifra superior a los seis millones de pesos, porque “otra vez nos dejaron sin nada, “Los daños sí son mayores, todavía no tenemos con exactitud la cantidad, porque es un tema que tendrán que valorar peritos de la Procuraduría y una vez que tengamos el resultado, lo daremos a conocer; pero si nos dejaron otra vez sin nada, destrozaron todo, se quemaron prácticamente todas las oficinas, entonces, ahora si sentimos que volvemos a estar en una situación difícil en torno nuestras oficinas del PRI”, indicó.
La situación se torna más complicada porque el Comité Directivo Estatal del tricolor todavía le debe a la empresa que llevó a cabo la reparación de los daños ocasionados ese 25 de abril de 2013.
Aparte de los daños a la infraestructura, los dirigentes del PRI lamentan las pérdidas de la documentación que había en las oficinas, sobre todo porque el instituto político estaba en temporada de afiliación.
Señaló que las áreas que más daño sufrieron en esta ocasión fueron la de Finanzas y la de Organización.
La dirigencia estatal del PRI pugnó porque los gobiernos estatal y federal ya tiendan los canales de comunicación con los dirigentes del movimiento para poder darle a la población en general, a las organizaciones, a las empresas y a los partidos políticos las garantías de seguridad y protección que necesita. (Baltazar Jiménez Rosales)
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