ORDENADA MARCHA

*No se registraron disturbios en la movilización de normalistas en Acapulco: Jesús Martínez Garnelo 

Contra todos los pronósticos, la multitudinaria marcha que ayer realizaron en Acapulco estudiantes de la Escuela Normal Rural “Raúl Isidro Burgos”, de Ayotzinapa, apoyados por normalistas rurales de otras entidades de la República y maestros disidentes del estado y del país, entre otras organizaciones sociales y gremiales, se caracterizó por su orden y tranquilidad.
Por lo mismo, los cientos de elementos antimotines que la Secretaría de Seguridad Pública y Protección Civil desplegó en Acapulco no tuvieron que intervenir porque sencillamente no se registraron los disturbios que se esperaban.
Incluso, se pudo observar que al final de la interminable marcha una brigada de los mismos manifestantes iba levantando su basura.

La tranquilidad de la marcha fue destacada a través de un boletín de prensa por el propio secretario general de Gobierno, Jesús Martínez Garnelo, quien resaltó que “el grupo de manifestantes se condujo de manera pacífica por las calles de este destino turístico”.
Mediante el comunicado de prensa, Martínez Garnelo señaló que en la manifestación de ayer en el puerto no se registraron incidentes y hubo sólo algunas pintas en determinados establecimientos comerciales ubicados en Costera Miguel Alemán, por lo que los visitantes y lugareños pueden acudir a los centros de diversión y establecimientos comerciales de este destino de playa, sin riesgo alguno.
Eso sí, debido a las expectativas de disturbios, las playas de Acapulco lucieron vacías, al igual que sus avenidas, pues mientras que muchos centros comerciales cerraron, las reservaciones en los hoteles para este fin de semana fueron canceladas en un 95 por ciento, según algunos reportes.

LA MARCHA 

La demanda del enorme contingente que marchó por la Costera Miguel Alemán fue una: justicia por el asesinato de tres estudiantes de Ayotzinapa durante los hechos violentos del 26 y 27 de septiembre en Iguala, perpetrados por policías preventivos y un grupo de sicarios al servicio del grupo criminal denominado “Guerreros Unidos”, pero también por la muerte de David Josué García Evangelista, jugador del “Club Avispones de Chilpancingo”, del chofer del autobús que transportaba el equipo y una civil, quienes fueron ultimados en los mismos hechos.
El reclamo fue unánime: detención, encarcelamiento y castigo al ex alcalde de Iguala, José Luis Abarca Velázquez —desaforado la misma madrugada de ayer por el pleno del Congreso local— así como a los culpables materiales e intelectuales del crimen que resulten involucrados en las investigaciones.
Los contingentes arribaron a este puerto entre las ocho y nueve de la mañana a bordo de casi 50 autobuses comerciales y se concentraron sobre la vía rápida. Mientras un nutrido grupo de transportistas —presuntamente de choque— aguardaba sobre la misma avenida. La marcha partió al medio día desde la Calzada Pie de la Cuesta, transcurrió por la vía rápida y se enfilo hacia la Costera Miguel Alemán hasta el Centro de Convenciones.
El gobierno estatal desplegó a cientos de elementos de la Secretaría de Seguridad Pública y Protección Civil en esta ciudad para reaccionar ante posibles disturbios de los manifestantes, sin embargo, no se registraron alteraciones al orden público.
A este punto arribaron los estudiantes de la Normal de Ayotzinapa, los padres de los 43 estudiantes desaparecidos y miembros de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación (CETEG) de cuatro regiones, así como la comisión de maestros de la Sección 22 de Oaxaca en apoyo al movimiento de los normalistas.
Docentes sindicalizados del Colegio de Bachilleres y de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAG). A la marcha se sumaron sectores sociales, presentantes del Movimiento Popular Guerrerense (MPG) y activistas de derechos humanos.
Los contingentes avanzaron pacíficamente por la avenida Costera Miguel Alemán.
Durante el trayecto los manifestantes realizaron pintas en fachadas de centros comerciales, oficinas de gobierno y espacios públicos.
Personal de algunos comercios, principalmente de restaurantes ubicados sobre dicha avenida, obsequiaron agua y naranjas a los manifestantes para refrescarse, acto que agradecieron.
Alrededor de las cuatro de la tarde, los manifestantes arribaron al Centro de Internacional de Convenciones donde efectuaron un mitin donde exigieron la presentación con vida de los 43 normalistas desaparecidos.
Durante la ronda de participaciones, algunos padres de los jóvenes manifestaron su coraje, indignación y desesperación porque no saben nada de sus hijos, pero no pierden las esperanzas de que pronto regresen con ellos.
Afirmaron que no van a descansar hasta encontrarlos y que el movimiento seguirá tomando fuerza a medida que las autoridades federales y estatales no den resultados sobre esa delicada situación.