“Borrego” que venían los ayotzys y desalojaron el Vicente Guerrero

El edificio Vicente Guerrero fue desalojado por una falsa amenaza de que normalistas irían a incendiarlo, los trabajadores indicaron que es casi imposible trabajar con la psicosis que se ha generado por el conflicto que creó la desaparición de 43 estudiantes de Ayotzinapa en la ciudad de
Iguala.
Alrededor de las 12 del día los empleados de gobierno que laboran en este edificio localizado en la esquina que forman la avenida Juárez y la calle Quintana Roo en pleno centro de la ciudad, fueron avisados que desalojaran el inmueble pues tenían reporte de que los normalistas de Ayotzinapa acudirían a quemar este edificio como parte de sus protestas con la que demandan la aparición con vida de sus 43 compañeros.
La versión resultó creíble porque la semana pasada justamente el día lunes fue incendiado parte del palacio de gobierno, asimismo ayer amanecieron quemadas las oficinas del programa Guerrero Cumple, además de que un grupo de normalistas que viajaba en cinco autobuses se trasladaba de Tixtla a esta capital, por ello en menos de 10 minutos el inmueble estaba completamente vacío. Algunos trabajadores que se quedaron cerca del edificio comentaron que todo apunta a que se trató de una broma de mal gusto, o de algún trabajador que para tener un día de descanso extra realizó la llamada alertando que los normalistas atacarían este inmueble, pues los normalistas a bordo de los autobuses se fueron directamente a la caseta de Palo Blanco a tomarla durante poco más de una hora, después regresaron a su plantel.
“Ahí póngale en su periódico que como trabajadores no estamos dispuestos a vivir en la psicosis, por eso le exigimos al gobierno garantías para el buen desempeño de nuestras labores”, comentó uno de los empleados que se dirigió al reportero al momento de abandonar el edificio que alberga dependencias como la Secretaría del Medio Ambiente, el Tribunal de Conciliación y Arbitraje, la Procuraduría de Protección Ecológica, el área jurídica de la Secretaría de la Mujer entre otras. (Por Abel Miranda Ayala)

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