Indolencia e incapacidad gubernamental provocan enorme caos vial en la ciudad

*Nuevamente el bloqueo de calles por algún reclamo al gobierno y las muchas obras públicas inconclusas desquiciaron la ciudad. 

Abel Miranda y Baltazar Jiménez 

 Dos manifestaciones de protesta, una contra las autoridades gubernamentales y otra por un conflicto de grilla universitaria al interior de la Preparatoria Uno de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAG) desquiciaron totalmente el tráfico principalmente en el centro y la parte norte de la ciudad.

El caos vehicular se agravó aún más por las condiciones en las que opera la Subsecretaría de Tránsito y Vialidad —con un reducido número de agentes operativos— y por las obras de modernización del bulevar “Vicente Guerrero”, es decir, no había forma de circular por ningún lado.
Las complicaciones iniciaron alrededor de las diez de la mañana cuando discapacitados y adultos mayores pertenecientes a la asociación “Digna Ochoa y Plácido”, encabezados por Juan Valenzo Villanueva, bloquearon las principales calles y avenidas del centro de la ciudad: la esquina que forman Juan Ruiz de Alarcón y Colón; Ignacio Ramírez y Colón; la avenida Álvarez y Colón, a la entrada del Paso a Desnivel y la calle Altamirano.
Por si fuera poco, el caos vial se convirtió en una verdadera locura, cuando un grupo de maestros de la Preparatoria Número Uno de la UAG, al no ser atendidos por un conflicto interno que se vive al interior de esa institución educativa, de la toma de su edificio pasaron a bloquear la avenida Juárez En lo que corresponde a los discapacitados y ancianos integrantes de la Asociación “Digna Ochoa y Plácido”, su dirigente, Juan Valenzo Villanueva, indicó que su protesta se enfoca a una exigencia al gobierno del estado para que se incremente el monto del apoyo que se les otorga a través del programa “Guerrero Cumple”, que actualmente es de 500 pesos mensuales: “queremos que se aumente a 800 que aún es poco para una persona que difícilmente podrá conseguir un trabajo por sus limitaciones físicas”.
Además de que existen muchas personas que no han sido beneficiadas con este programa y que requieren de la ayuda, un tercer punto, y que a decir de Valenzo Villanueva es el más importante, se trata de que el gobernador del estado envíe una iniciativa de ley al Congreso para que el programa de apoyo a las personas con discapacidad se convierta en un decreto de ley que cualquier gobernante de cualquier partido político tenga que respetar y acatar.
Los discapacitados fueron atendidos por funcionarios menores que no resolvieron sus exigencias, por lo que alrededor de las tres de la tarde se levantaron, pero advirtieron que en los próximos días volverán a tomar las calles hasta que reciban el apoyo del gobernador para garantizar la permanencia del programa.

La incapacidad de las autoridades 

Y por si fuera poca la indolencia de las autoridades gubernamentales para atender con prontitud este tipo de manifestaciones, la incapacidad de la Subsecretaría de Tránsito y Vialidad quedó de manifiesta por el muy reducido número de agentes operativos: son sólo 33 los que prestan servicio y de ellos una parte se destina para el Valle de El Ocotito.
Además, cabe recordar que hasta el momento, y desde hace poco más de una semana, la Subsecretaría de Tránsito y Vialidad se encuentra acéfala, ya que su anterior titular, Germán Martínez Alvarez, renunció al cargo a la llegada de Constantino González a la Secretaría de Seguridad Pública del Ayuntamiento de Chilpancingo.
Precisamente por la falta de “tamarindos”, durante el caos vial, en el centro de la ciudad cuando mucho eran dos o tres los agentes que había, todos se destinaron a las vialidades que no fueron ocupadas por los manifestantes, como el encauzamiento del río Huacapa, a la altura de la tienda Coopel; el mercado central “Baltasar R. Leyva Mancilla”, el bulevar “Vicente Guerrero” a la altura de la calle Ayutla, entre otros, que fue hacía donde se dirigía el tráfico vehicular.