Homicidio en Palo Blanco motivó violenta reacción de la UPOEG
*Aplicando “usos y costumbres” detuvieron a cuatro personas, dos
son policías; pero dicen poder probar que se trata de delincuentes.
La mañana del sábado pasado (7:30 horas) fue asesinado a balazos el empresario Wilbert Hernández López, suscitándose el atentado al interior de su negocio ubicado a orillas de la carretera Libre México Acapulco en Palo Blanco, donde envasaba para su venta agua purificada en garrafones, con
razón social “Agua La Imagen”.
Contaba 31 años de edad y era originario y vecino de esa misma población, donde radicaba en una casa de la calle Benito Juárez, en el barrio de San Isidro.
Dos empleados de la embotelladora de agua fueron lesionados y reciben atención médica. Miembros de la Policía Ciudadana que opera el Sistema de Seguridad y Justicia Ciudadano, dependiente de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG), en comunidades del municipio de Chilpancingo, confirmaron la detención de 4 personas que “podrían estar relacionadas con el homicidio del empresario Wilbert Hernández López”, aunque, optaron por reservarse ciertos detalles al respecto, por ejemplo, que la víctima era hermano de uno de sus comandantes.
De acuerdo con el comandante Ernesto Gallardo Grande, tras conocerse el homicidio del empresario en la comunidad de Palo Blanco municipio de Chilpancingo, la policía del Sistema de Seguridad y Justicia Ciudadano que opera en El Ocotito y Tierra Colorada activó a sus más de 200 policías ciudadanos tras la pista de los autores del homicidio.
Agregó que derivado de esa acción y de las indagatorias realizadas se logró la detención de cuatro personas a las que calificó como “presuntos miembros de una banda delictiva que opera en la zona”.
Es más, dijo que esta “célula delictiva” podría estar ligada con la banda de Los Rojos y además del asesinato del empresario, se les relaciona con otros crímenes y desapariciones de personas, mismas que podrían ser localizadas en fosas clandestinas que los detenidos ya revelaron donde se encuentran. Gallardo Grande mencionó, que hace un mes fue detenido un “sicario” miembro de esta célula delictiva, de quien también se ha obtenido información importante, sin embargo esta persona no se ha presentado a los medios de comunicación, porque se espera primero detener a más miembros de la banda.
En la zona ayer domingo se apreciaron retenes carreteros en las entradas norte y sur de la población, además de continuos patrullajes de los policías ciudadanos, además de acuerdo con vecinos de la población, se han realizado varios cateos a viviendas donde se presume la presencia de delincuentes. Respecto a las personas que fueron detenidas por la Policía Ciudadana solo mencionó a María Campos Vega, de los tres restantes dijo que son hombres, a quienes están interrogando “para estar bien seguros de su culpabilidad”.
Aclaró que a los detenidos los trasladaron por seguridad a la comisaría de Buena Vista de la Salud y espera que la CODEEHUM envíe a sus representantes para que constaten su buen estado de salud. LO QUE NO DIJERON: Entre los detalles que el comandante Ernesto Gallardo se reservó, está el hecho de que la víctima del homicidio Wilbert, es hermano de Johnny Hernández López comandante de la Policía Ciudadana de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero, lo que “agilizó” las acciones de investigación y captura.
Tampoco mencionó que uno de los tres hombres detenidos es el esposo de María Campos Vega, Jorge Santos Salvador y, lo peor, que los otros dos “sospechosos” a quienes pusieron entre rejas son un par de policías del estado que cumpliendo órdenes del gobierno, brindaban seguridad a las hermanas María y Romana Campos Vega, a solicitud de la Comisión Estatal de Derechos Humanos.
Esto es, que las armas que portaban ambos gendarmes eran oficiales y perfectamente legales para el desempeño de su trabajo. Total, hasta donde se dice, les echaron montón, los sometieron mediante el uso de la fuerza y a los cuatro (ahora se sabe) los trasladaron “por seguridad” a la comisaría de Buena Vista de la Salud.
La identidad de los detenidos (los tres hombres) trascendió a raíz de una denuncia que un representante legal de las hermanas Campos Vega formalizó ante las autoridades ministeriales (Fiscalía Regional de la PGJE) en el Puerto de Acapulco, solicitando la inmediata intervención del Estado, para la liberación de las cuatro personas en mención. (Con información de Abel Miranda y agencias)
La mañana del sábado pasado (7:30 horas) fue asesinado a balazos el empresario Wilbert Hernández López, suscitándose el atentado al interior de su negocio ubicado a orillas de la carretera Libre México Acapulco en Palo Blanco, donde envasaba para su venta agua purificada en garrafones, con
razón social “Agua La Imagen”.
Contaba 31 años de edad y era originario y vecino de esa misma población, donde radicaba en una casa de la calle Benito Juárez, en el barrio de San Isidro.
Dos empleados de la embotelladora de agua fueron lesionados y reciben atención médica. Miembros de la Policía Ciudadana que opera el Sistema de Seguridad y Justicia Ciudadano, dependiente de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG), en comunidades del municipio de Chilpancingo, confirmaron la detención de 4 personas que “podrían estar relacionadas con el homicidio del empresario Wilbert Hernández López”, aunque, optaron por reservarse ciertos detalles al respecto, por ejemplo, que la víctima era hermano de uno de sus comandantes.
De acuerdo con el comandante Ernesto Gallardo Grande, tras conocerse el homicidio del empresario en la comunidad de Palo Blanco municipio de Chilpancingo, la policía del Sistema de Seguridad y Justicia Ciudadano que opera en El Ocotito y Tierra Colorada activó a sus más de 200 policías ciudadanos tras la pista de los autores del homicidio.
Agregó que derivado de esa acción y de las indagatorias realizadas se logró la detención de cuatro personas a las que calificó como “presuntos miembros de una banda delictiva que opera en la zona”.
Es más, dijo que esta “célula delictiva” podría estar ligada con la banda de Los Rojos y además del asesinato del empresario, se les relaciona con otros crímenes y desapariciones de personas, mismas que podrían ser localizadas en fosas clandestinas que los detenidos ya revelaron donde se encuentran. Gallardo Grande mencionó, que hace un mes fue detenido un “sicario” miembro de esta célula delictiva, de quien también se ha obtenido información importante, sin embargo esta persona no se ha presentado a los medios de comunicación, porque se espera primero detener a más miembros de la banda.
En la zona ayer domingo se apreciaron retenes carreteros en las entradas norte y sur de la población, además de continuos patrullajes de los policías ciudadanos, además de acuerdo con vecinos de la población, se han realizado varios cateos a viviendas donde se presume la presencia de delincuentes. Respecto a las personas que fueron detenidas por la Policía Ciudadana solo mencionó a María Campos Vega, de los tres restantes dijo que son hombres, a quienes están interrogando “para estar bien seguros de su culpabilidad”.
Aclaró que a los detenidos los trasladaron por seguridad a la comisaría de Buena Vista de la Salud y espera que la CODEEHUM envíe a sus representantes para que constaten su buen estado de salud. LO QUE NO DIJERON: Entre los detalles que el comandante Ernesto Gallardo se reservó, está el hecho de que la víctima del homicidio Wilbert, es hermano de Johnny Hernández López comandante de la Policía Ciudadana de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero, lo que “agilizó” las acciones de investigación y captura.
Tampoco mencionó que uno de los tres hombres detenidos es el esposo de María Campos Vega, Jorge Santos Salvador y, lo peor, que los otros dos “sospechosos” a quienes pusieron entre rejas son un par de policías del estado que cumpliendo órdenes del gobierno, brindaban seguridad a las hermanas María y Romana Campos Vega, a solicitud de la Comisión Estatal de Derechos Humanos.
Esto es, que las armas que portaban ambos gendarmes eran oficiales y perfectamente legales para el desempeño de su trabajo. Total, hasta donde se dice, les echaron montón, los sometieron mediante el uso de la fuerza y a los cuatro (ahora se sabe) los trasladaron “por seguridad” a la comisaría de Buena Vista de la Salud.
La identidad de los detenidos (los tres hombres) trascendió a raíz de una denuncia que un representante legal de las hermanas Campos Vega formalizó ante las autoridades ministeriales (Fiscalía Regional de la PGJE) en el Puerto de Acapulco, solicitando la inmediata intervención del Estado, para la liberación de las cuatro personas en mención. (Con información de Abel Miranda y agencias)
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