Detalla Mazón problemas financieros de la Secretaría de Salud a diputados
El secretario de Salud del gobierno del estado, Lázaro Mazón Alonso, aclaró ayer ante diputados integrantes de la Comisión de Salud del Congreso local que el despido masivo de 998 trabajadores de esa dependencia es por recomendación de la Auditoría Superior de la Federación y la propia Contraloría General del Estado, previo análisis de la nómina de esa instancia.
No escondió además que esta grave situación, aunado al déficit financiero superior a los 500 millones de pesos que heredó la administración gubernamental de Zeferino Torreblanca Galindo,
mantienen a la Secretaría de Salud en un serio problema, toda vez que para liquidar a estos 998 trabajadores requiere de alrededor de 40 millones de pesos.
En la reunión de trabajo, Mazón Alonso incluso recibió el reconocimiento de varios de los diputados locales integrantes de la Comisión de Salud, entre ellos del secretario, el legislador perredista Roger Arellano, quien casi le suplicó no renunciar a la Secretaría de Salud, ante el hecho de que el dirigente Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Andrés Manuel López Obrador, lo destapó como virtual candidato del ahora partido político a la gubernatura del estado.
Lo que si les pidió el secretario de Salud a los diputados locales integrantes de la Comisión de Salud es que gestionen mayores recursos ante el gobierno federal para esta dependencia con el fin de inyectarle más presupuesto a la prevención de las enfermedades, ya que resulta más barato que atacarlas cuando ya están.
Reconoció que la presencia de estos 998 trabajadores en la nómina de la Secretaría de Salud está ocasionando un gran déficit financiero, que en determinado momento ocasionará que no alcancen los recursos para el pago de salarios Rechazó asimismo que el despido de estos 998 trabajadores de la Secretaría de Salud sea una venganza del gobernador Angel Aguirre Rivero por el destape que de él hizo el líder de Morena, Andrés Manuel López Obrador y en este sentido aclaró que la liquidación de estos empleados es una orden de la Auditoría Superior de la Federación en coordinación con la Contraloría General del Estado.
Dijo además que la herencia de plazas de médicos, enfermeras y trabajadores administrativos a sus hijos es otra de las causas del problema financiero de la Secretaría de Salud, sobre todo porque de esta manera la dependencia se llena de gente sin el perfil adecuado.
Señaló asimismo que al inicio de la presente administración gubernamental, la Secretaría de Salud se vio obligada a contratar más personal para poder abrir 400 Centros de Salud que durante el gobierno de Zeferino Torreblanca Galindo permanecieron cerrados, además de que tuvieron que contratarse otros mil empleados más, aproximadamente, para el Hospital General “Raymundo Abarca Alarcón” de Chilpancingo, ya que en el pasado reciente operaba con sólo 200 empleados. Otro problema para la Secretaría de Salud, mencionó, es que para la contingencia provocada por la tormenta tropical “Manuel” y el huracán “Ingrid”, la federación no le ayudó a comprar medicamentos y material de curación. (Baltazar Jiménez Rosales)
No escondió además que esta grave situación, aunado al déficit financiero superior a los 500 millones de pesos que heredó la administración gubernamental de Zeferino Torreblanca Galindo,
mantienen a la Secretaría de Salud en un serio problema, toda vez que para liquidar a estos 998 trabajadores requiere de alrededor de 40 millones de pesos.
En la reunión de trabajo, Mazón Alonso incluso recibió el reconocimiento de varios de los diputados locales integrantes de la Comisión de Salud, entre ellos del secretario, el legislador perredista Roger Arellano, quien casi le suplicó no renunciar a la Secretaría de Salud, ante el hecho de que el dirigente Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Andrés Manuel López Obrador, lo destapó como virtual candidato del ahora partido político a la gubernatura del estado.
Lo que si les pidió el secretario de Salud a los diputados locales integrantes de la Comisión de Salud es que gestionen mayores recursos ante el gobierno federal para esta dependencia con el fin de inyectarle más presupuesto a la prevención de las enfermedades, ya que resulta más barato que atacarlas cuando ya están.
Reconoció que la presencia de estos 998 trabajadores en la nómina de la Secretaría de Salud está ocasionando un gran déficit financiero, que en determinado momento ocasionará que no alcancen los recursos para el pago de salarios Rechazó asimismo que el despido de estos 998 trabajadores de la Secretaría de Salud sea una venganza del gobernador Angel Aguirre Rivero por el destape que de él hizo el líder de Morena, Andrés Manuel López Obrador y en este sentido aclaró que la liquidación de estos empleados es una orden de la Auditoría Superior de la Federación en coordinación con la Contraloría General del Estado.
Dijo además que la herencia de plazas de médicos, enfermeras y trabajadores administrativos a sus hijos es otra de las causas del problema financiero de la Secretaría de Salud, sobre todo porque de esta manera la dependencia se llena de gente sin el perfil adecuado.
Señaló asimismo que al inicio de la presente administración gubernamental, la Secretaría de Salud se vio obligada a contratar más personal para poder abrir 400 Centros de Salud que durante el gobierno de Zeferino Torreblanca Galindo permanecieron cerrados, además de que tuvieron que contratarse otros mil empleados más, aproximadamente, para el Hospital General “Raymundo Abarca Alarcón” de Chilpancingo, ya que en el pasado reciente operaba con sólo 200 empleados. Otro problema para la Secretaría de Salud, mencionó, es que para la contingencia provocada por la tormenta tropical “Manuel” y el huracán “Ingrid”, la federación no le ayudó a comprar medicamentos y material de curación. (Baltazar Jiménez Rosales)
Comentarios
Publicar un comentario