Alfabetizadores pararon labores para exigir el pago de su salario

Trabajadores del programa “Alfabetizar para Humanizar”, que depende del esquema de programas de apoyo social Guerrero Cumple, se manifestaron ayer para exigir el pago de sus salarios que desde hace 45 días no reciben, “son salarios muy precarios y de los que dependen más de 50 familias tan
sólo en la capital”.
La coordinadora del programa Olivia Jaimes Godínez, indicó que todos los trabajadores firmaron un contrato en el que se estableció que recibirían sus respectivos una vez al mes, sin embargo en este momento hace 45 días no reciben sus emolumentos, lo que ya representa una irregularidad.
Añadió que de parte de sus superiores les han dicho que el retraso se debe a que el pago se transfirió para que lo haga directamente la Secretaría de Finanzas, pero como trabajadores ese argumento no les deja satisfecho puesto que se trata de situaciones administrativas que no competen a los trabajadores que dependen económicamente de ese salario.
Por ello pidieron establecer una mesa de diálogo en la que se les informe puntualmente cuándo recibirán su pago, porque sólo les dijeron que tendrían retrasos pero no de cuanto tiempo, no les dijeron cuándo les van a pagar y eso es lo que les preocupa.
Refirió que hasta este momento a pesar de no haber recibido sus salarios los trabajadores del programa de alfabetización no han dejado de hacer su trabajo, se mantiene asesorando a quienes por diversas circunstancias no tuvieron la oportunidad de estudiar, “Nos dedicamos a alfabetizar a gente que no tuvo oportunidad de estudiar, es un programa muy acertado que implemento el gobernador, pero es la primera vez que se nos atrasa tanto con los pagos”.
Finalmente indicó que los salarios que reciben los asesores son muy bajos y oscilan en un promedio de 6 mil pesos mensuales, por ello el llamado a la coordinadora de los programas Guerrero cumple, Mariana García Guillen, para que se busque la forma de pagar los emolumentos a la brevedad y así hacer que la alfabetización no se detenga. (Por Abel Miranda Ayala)

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