Temen que la fetidez del río Huacapa y el intenso calor detonen enfermedades

*Preocupa a trabajadores del palacio de gobierno esta situación, porque ellos tienen que comer en los negocios de las cercanías 

Trabajadores del palacio de gobierno urgieron a las dependencias encargadas de reconstruir el cauce del río Huacapa que agilicen los trabajos y que se reactiven los colectores de “aguas negras” pues los olores fétidos que desprende se han vuelto insoportables y más durante la última semana en que las temperaturas fueron
muy altas.
Destacaron que tienen temor de que los pestilentes olores puedan generar algún tipo de enfermedades tanto en vías respiratorias, de la piel o estomacales, pues la mayoría tiene que comer ya sea en el interior del palacio o en los negocios que se instalan en las cercanías.
Refirieron que los daños que causó la tormenta tropical “Manuel” frente al palacio fueron los primeros que se repararon, por lo que hace casi cuatro meses se reabrieron a la circulación vehicular las laterales del encauzamiento del río Huacapa, sin embargo desde que pasó la contingencia se han potencializado los olores, pues aún no se restablece el paso de las aguas residuales en los colectores subterráneos.
“Nuestro temor es que en la temporada de calor, los alimentos se descomponen con mayor rapidez y si a ello se le aumenta la contaminación que genera el paso de las ‘aguas negras’ el problema se incrementa ya que hay un mayor número de bacterias en el aíre y con ello estamos más expuestos a contraer enfermedades”, señaló don Martín Esteban Casarrubias.
Indicó que los trabajadores entienden que se trata de un problema mayor, sin embargo consideró que se tienen que proyectar obras de forma que beneficien a la mayor cantidad de población, porque en este momento con el escurrimiento de las “aguas negras” se pone en riesgo a todos los trabajadores del palacio “Son muchas personas conglomeradas en un mismo espacio, por lo que ello incrementa el riesgo, por eso creo que debieron haber concluido los canales y aunque en otras zonas de la ciudad donde hay menos gente el agua siguiera corriendo libremente, señaló.
Finalmente indicó que como trabajadores han estado concientizando a sus compañeros para no adquirir alimentos fuera del palacio, y en algunos casos se han formado una especie de cooperativas en las que tres o cuatro empelados se cooperan para llevar alimentos y así evitar consumir cosas contaminadas, “de manera personal tratamos de protegernos, pero el riesgo es muy alto, por eso nuestro llamado a que terminen estos trabajos porque conforme avance la temporada de calor avanzará el riesgo”. (Abel Miranda Ayala)