Rinde Aguirre “en lo oscurito” y “a capella”, su Tercer Informe
Ahora sí que literalmente “en lo oscurito” fue que el gobernador Angel Aguirre Rivero rindió ayer su Tercer Informe de labores ante el Congreso del Estado, cuyo mensaje no se llevó más allá de cinco minutos por el apagón que se registró en el Salón de Sesiones a consecuencia de una falla en la instalación eléctrica.
Para la sesión pública y solemne del pleno del Congreso local en la que el gobernador daría su Tercer Informe de Labores todo estuvo dispuesto desde la semana pasada, incluso el fin de semana personal del propio Ayuntamiento de Chilpancingo se dedicó a pintar las guarniciones y desde la noche del domingo la Avenida Trébol Sur fue circundada por vallas metálicas, mientras que elementos de Seguridad Pública hicieron guardia y antimotines se mantenían a la expectativa, “por si las dudas”.
Sin embargo, nada en el exterior del Congreso del Estado enturbió el Tercer Informe de Gobierno de Angel Aguirre Rivero, nada. Todo fue dentro del recinto parlamentario.
La sesión inició aproximadamente seis minutos antes de las once de la mañana con el acostumbrado pase de lista de los diputados locales y 43 dijeron “presente”.
En punto de las 11:00 horas, de acuerdo al protocolo que dicta la formalidad legislativa, el gobernador Aguirre Rivero fue ingresado al salón de plenos.
Lo acompañaba la representante del presidente de la República, Rosario Robles Berlanga, secretaria de Desarrollo Social. Ya estaban en el interior del recinto parlamentario sus invitados especiales: los ex gobernadores René Juárez Cisneros y Rubén Figueroa Alcocer, senadores, diputados federales, presidentes municipales; el presidente del Comité Ejecutivo Nacional del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Jesús Zambrano Grijalba; el ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano y el presidente de la Junta de Coordinación Política del PRD en la Cámara de Diputados federal, Silvano Aureoles y jerarcas católicos encabezados por el arzobispo de Acapulco, Carlos Garfias Merlos, así como dirigentes estatales de los siete partidos políticos.
Vinieron los honores a la Bandera Nacional, en los cuales ahora no se cantó el Himno a Guerrero y posteriormente, vinieron las posturas de las diferentes fracciones parlamentarias y representaciones de partido.
El mandatario estatal aguantó “a pie juntillas” las críticas y cuestionamientos que le hicieron el petista Jorge Salazar Marchán, la verdecologista Karen Castrejón y la panista Delfina Concepción Oliva. Cuando en representación de la Fracción Parlamentaria del Partido Revolucionario Institucional, el diputado local Héctor Astudillo Flores iniciaba la lectura de su postura sobrevino el primer apagón.
Después sucedieron cuando menos otros 17. “Compló” gritaron algunos en tanto otros chiflaron y unos más se burlaban de los organizadores del evento. El primer apagón ocurrió precisamente cuando las manecillas del reloj marcaban las 12:00 horas.
A partir de ahí y por una larga hora ya no pudo restablecerse. La sesión solemne transcurrió en penumbras, en lo oscurito. La seriedad del gobernador Angel Aguirre era absoluta, de aparente tranquilidad, pero… Sobra decir que las posturas de las fracciones parlamentarias del PRI así como del PRD, en voz de Astudillo Flores y de Bernardo Ortega Jiménez, también presidente de la Comisión de Gobierno, fueron “a capella”.
Incluso éste último ofreció las correspondientes disculpas a los presentes. Vino el informe de labores de Angel Aguirre Rivero, que también tuvo que ser “a capella”, y que por las mismas condiciones tuvo que reducir a no más allá de cinco minutos, es decir, única y exclusivamente para cumplir con el formalismo que exigía el protocolo, nada más.
Y fue cuando precisamente el gobernador Angel Aguirre Rivero daba su mensaje que se escuchó un estruendo en la calle: las tres “cuchillas” de la red de alta tensión se “botaron”.
Fue una falla interior —del edificio parlamentario— explicó un electricista que ya trabajaba en el poste del cual se botaron las “cuchillas” y lo secundó un trabajador de mantenimiento del propio Congreso.
A eso de la una de la tarde, Aguirre Rivero, acompañado por la representante presidencial, diputados locales, federales, senadores y sus demás invitados especiales salieron del Congreso del Estado para dirigirse al Auditorio Estatal Sentimientos de la Nación, en donde dio otro mensaje al pueblo de Guerrero, pero, como dijeran “en la tele”, “esa es otra historia. (Baltazar Jiménez Rosales)
Para la sesión pública y solemne del pleno del Congreso local en la que el gobernador daría su Tercer Informe de Labores todo estuvo dispuesto desde la semana pasada, incluso el fin de semana personal del propio Ayuntamiento de Chilpancingo se dedicó a pintar las guarniciones y desde la noche del domingo la Avenida Trébol Sur fue circundada por vallas metálicas, mientras que elementos de Seguridad Pública hicieron guardia y antimotines se mantenían a la expectativa, “por si las dudas”.
Sin embargo, nada en el exterior del Congreso del Estado enturbió el Tercer Informe de Gobierno de Angel Aguirre Rivero, nada. Todo fue dentro del recinto parlamentario.
La sesión inició aproximadamente seis minutos antes de las once de la mañana con el acostumbrado pase de lista de los diputados locales y 43 dijeron “presente”.
En punto de las 11:00 horas, de acuerdo al protocolo que dicta la formalidad legislativa, el gobernador Aguirre Rivero fue ingresado al salón de plenos.
Lo acompañaba la representante del presidente de la República, Rosario Robles Berlanga, secretaria de Desarrollo Social. Ya estaban en el interior del recinto parlamentario sus invitados especiales: los ex gobernadores René Juárez Cisneros y Rubén Figueroa Alcocer, senadores, diputados federales, presidentes municipales; el presidente del Comité Ejecutivo Nacional del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Jesús Zambrano Grijalba; el ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano y el presidente de la Junta de Coordinación Política del PRD en la Cámara de Diputados federal, Silvano Aureoles y jerarcas católicos encabezados por el arzobispo de Acapulco, Carlos Garfias Merlos, así como dirigentes estatales de los siete partidos políticos.
Vinieron los honores a la Bandera Nacional, en los cuales ahora no se cantó el Himno a Guerrero y posteriormente, vinieron las posturas de las diferentes fracciones parlamentarias y representaciones de partido.
El mandatario estatal aguantó “a pie juntillas” las críticas y cuestionamientos que le hicieron el petista Jorge Salazar Marchán, la verdecologista Karen Castrejón y la panista Delfina Concepción Oliva. Cuando en representación de la Fracción Parlamentaria del Partido Revolucionario Institucional, el diputado local Héctor Astudillo Flores iniciaba la lectura de su postura sobrevino el primer apagón.
Después sucedieron cuando menos otros 17. “Compló” gritaron algunos en tanto otros chiflaron y unos más se burlaban de los organizadores del evento. El primer apagón ocurrió precisamente cuando las manecillas del reloj marcaban las 12:00 horas.
A partir de ahí y por una larga hora ya no pudo restablecerse. La sesión solemne transcurrió en penumbras, en lo oscurito. La seriedad del gobernador Angel Aguirre era absoluta, de aparente tranquilidad, pero… Sobra decir que las posturas de las fracciones parlamentarias del PRI así como del PRD, en voz de Astudillo Flores y de Bernardo Ortega Jiménez, también presidente de la Comisión de Gobierno, fueron “a capella”.
Incluso éste último ofreció las correspondientes disculpas a los presentes. Vino el informe de labores de Angel Aguirre Rivero, que también tuvo que ser “a capella”, y que por las mismas condiciones tuvo que reducir a no más allá de cinco minutos, es decir, única y exclusivamente para cumplir con el formalismo que exigía el protocolo, nada más.
Y fue cuando precisamente el gobernador Angel Aguirre Rivero daba su mensaje que se escuchó un estruendo en la calle: las tres “cuchillas” de la red de alta tensión se “botaron”.
Fue una falla interior —del edificio parlamentario— explicó un electricista que ya trabajaba en el poste del cual se botaron las “cuchillas” y lo secundó un trabajador de mantenimiento del propio Congreso.
A eso de la una de la tarde, Aguirre Rivero, acompañado por la representante presidencial, diputados locales, federales, senadores y sus demás invitados especiales salieron del Congreso del Estado para dirigirse al Auditorio Estatal Sentimientos de la Nación, en donde dio otro mensaje al pueblo de Guerrero, pero, como dijeran “en la tele”, “esa es otra historia. (Baltazar Jiménez Rosales)
Comentarios
Publicar un comentario