Aumenta el riesgo en la presa de Cerrito Rico; está azolvada en un 50 por ciento
*Además, la “cortina” tiene que ser sometida a un análisis técnico
muy riguroso; en 70 años no ha recibido mantenimiento: ingenieros
Baltazar Jiménez Rosales
Además de que la cortina de la presa del Cerrito Rico debe ser sometida a un riguroso análisis técnico de ingeniería, el “vaso” tiene que ser desazolvado de manera urgente, porque en estos momentos, el azolve —tierra, piedras y troncos— lo cubre en un 50 por ciento y eso provoca que se llene demasiado rápido.
La alerta la dieron Rodrigo Alarcón Sánchez y Antonio Anaya Manzanares, presidente e integrante de la Junta de Honor del Colegio de Ingenieros Civiles Guerrerenses, respectivamente, quienes consideraron urgente que la Presa del Cerrito Rico sea sometida a un análisis técnico, ya que aparte de que ya tiene casi 70 años, “si ya le pasó algo al vertedor, algo le pudo haber pasado a la cortina y eso no lo podemos saber hasta que se haga un análisis a fondo”.
El presidente del Colegio de Ingenieros Civiles Guerrerenses, Rodrigo Alarcón, señaló que de por si todas las presas deben ser sometidas de manera periódica a estudios de mecánica de suelos, para constar su estabilidad por el empuje del agua, lo cual no se ha hecho con la presa del Cerrito Rico, apuntó.
Y es que dijo que desde que fue construida, hace ya casi 70 años, la presa del Cerrito Rico no ha sido desazolvada, por lo que en estos momentos, el “vaso” ya está al 50 por ciento de su capacidad, por la gran cantidad de tierra, piedras y troncos de árboles que lo cubren, lo cual hace que se llene muy rápido y ya no funcione para lo cual fue construida que es darle seguridad a la población que habita en la ciudad.
Anaya Manzanares reforzó lo dicho por el presidente del Colegio de Ingenieros: en las condiciones en que actualmente se encuentra, “cualquier lluvia atípica va a poner en serio peligro a la ciudad” y el más claro ejemplo de esto es la tromba que se registró la noche del 18 y la madrugada del 19 de abril, pues a pesar de que el aguacero tardó 70 minutos, la presa fue insuficiente para retener el agua y ello ocasionó inundaciones río abajo.
Los ingenieros Alarcón Sánchez y Anaya Manzanares aclararon que la vida útil de la presa del Cerrito Rico no ha terminado, aunque sí insistieron en que es necesario someterla a tareas de limpieza y desazolve y que la cortina sea objeto de un minucioso estudio, para que cumpla su objetivo de darle seguridad a la población.
Asimismo, propusieron la construcción de un canal que así como reciba el agua la lleve hasta la compuerta, lo cual “nos ahorraría muchos problemas”.
Baltazar Jiménez Rosales
Además de que la cortina de la presa del Cerrito Rico debe ser sometida a un riguroso análisis técnico de ingeniería, el “vaso” tiene que ser desazolvado de manera urgente, porque en estos momentos, el azolve —tierra, piedras y troncos— lo cubre en un 50 por ciento y eso provoca que se llene demasiado rápido.
La alerta la dieron Rodrigo Alarcón Sánchez y Antonio Anaya Manzanares, presidente e integrante de la Junta de Honor del Colegio de Ingenieros Civiles Guerrerenses, respectivamente, quienes consideraron urgente que la Presa del Cerrito Rico sea sometida a un análisis técnico, ya que aparte de que ya tiene casi 70 años, “si ya le pasó algo al vertedor, algo le pudo haber pasado a la cortina y eso no lo podemos saber hasta que se haga un análisis a fondo”.
El presidente del Colegio de Ingenieros Civiles Guerrerenses, Rodrigo Alarcón, señaló que de por si todas las presas deben ser sometidas de manera periódica a estudios de mecánica de suelos, para constar su estabilidad por el empuje del agua, lo cual no se ha hecho con la presa del Cerrito Rico, apuntó.
Y es que dijo que desde que fue construida, hace ya casi 70 años, la presa del Cerrito Rico no ha sido desazolvada, por lo que en estos momentos, el “vaso” ya está al 50 por ciento de su capacidad, por la gran cantidad de tierra, piedras y troncos de árboles que lo cubren, lo cual hace que se llene muy rápido y ya no funcione para lo cual fue construida que es darle seguridad a la población que habita en la ciudad.
Anaya Manzanares reforzó lo dicho por el presidente del Colegio de Ingenieros: en las condiciones en que actualmente se encuentra, “cualquier lluvia atípica va a poner en serio peligro a la ciudad” y el más claro ejemplo de esto es la tromba que se registró la noche del 18 y la madrugada del 19 de abril, pues a pesar de que el aguacero tardó 70 minutos, la presa fue insuficiente para retener el agua y ello ocasionó inundaciones río abajo.
Los ingenieros Alarcón Sánchez y Anaya Manzanares aclararon que la vida útil de la presa del Cerrito Rico no ha terminado, aunque sí insistieron en que es necesario someterla a tareas de limpieza y desazolve y que la cortina sea objeto de un minucioso estudio, para que cumpla su objetivo de darle seguridad a la población.
Asimismo, propusieron la construcción de un canal que así como reciba el agua la lleve hasta la compuerta, lo cual “nos ahorraría muchos problemas”.
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