Misa y marcha en memoria de los normalistas muertos.

Ayer se conmemoró el segundo aniversario luctuoso de Alexis Herrera Pino y Gabriel Echeverría de Jesús, los dos normalistas de Ayotzinapa que fueron abatidos a balazos durante un desalojo para liberar la Autopista del Sol, el 12 de diciembre del 2011, en el que participaron fuerzas policiacas federales, estatales
y ministeriales. Normalistas de Ayotzinapa encabezaron una misa sobre la carpeta asfáltica de la Autopista del Sol y una marcha multitudinaria en la que participaron policías comunitarios, maestros de la CETEG, organizaciones sociales, normalistas rurales de todo el país y familiares de los dos jóvenes fallecidos. Durante el evento los familiares de los dos normalistas, hicieron uso de la palabra para recalcar que a dos años de estos oprobiosos crímenes, no se ha hecho justicia, pues ninguno de los asesinos materiales o intelectuales ha sido encarcelado.
Las actividades iniciaron alrededor de las once de la mañana con la concentración de todos los contingentes en el punto conocido como el Parador del Marqués al sur de la capital, ahí se realizó una misa en la que pidieron por el eterno descanso del alma de los dos normalistas además de los luchadores sociales, Ana Lilia Gatica, Luis Olivares, Arturo Hernández Cardona, Rocío Mesino, Juventina Villa, Reynaldo Santana, Ángel Bandera, Rubén Santana y Sergio Santana. Tras concluida la misa, se inició un mitin político en el que participaron los padres de los dos jóvenes asesinados, después el director del Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan, quien destacó que lamentablemente la falta de acceso a la justicia ha sido un aliciente para que se sigan asesinando líderes sociales y defensores de derechos humanos, pero a la vez la falta de justicia es lo que hoy ha permitido que las organizaciones sociales se unan para mantener viva la lucha social.
En la lista de oradores también se incluyó al secretario técnico de la red de organismos civiles de derechos Humanos, Manuel Olivares, quien destacó que estos jóvenes fueron masacrados por exigir educación, por ello se mantiene la exigencia de justicia para los caídos y juicio político para el gobernador Ángel Aguirre Rivero.
El dirigente del Consejo de Ejidos y Comunidades Opositoras al proyecto hidroeléctrico La Parota, Marco Antonio Suástegui, quien señaló, "nosotros también hemos llorado por nuestros muertos, allá en medio del río Balsas, donde nuestro movimiento lucha para que se mantenga la tierra, donde nos hemos propuesto no permitir que entre la policía y desde aquí les decimos a los familiares de Alexis y Gabriel que no están solos, hoy hemos venido solo un puñado de 30 hombres pero no nos vamos a rajar".
Tras los discursos se depositó una ofrenda floral en cada una de las dos cruces que se colocaron a un costado de la carretera en memoria de los normalistas caídos el 12 de diciembre del 2011, sus familiares se prendieron veladoras, quemaron incienso, echaron agua bendita y después se formaron para iniciar la marcha que tardó más de dos horas para llegar al zócalo de la ciudad.
Al paso de los normalistas que durante todo el trayecto gritaron consignas, muchos propietarios de negocios salieron a bajar las cortinas como una forma de prevenir que pudieran ser víctimas de actos vandálicos.
Ya en el zócalo se realizó otro mitin político en el que participaron representantes de todas las organizaciones sociales y de las escuelas rurales del país que enviaron representaciones a esta actividad. (Por Abel Miranda Ayala)