Índices de desempleo en Guerrero, debajo de la media nacional: López

A pesar de la contingencia provocada por las lluvias a mediados de septiembre pasado, en Guerrero los índices de desempleo no se dispararon este año y se mantuvieron muy por debajo de la media nacional, con un 2.8 contra un 5 por ciento, informó el secretario del Trabajo y Previsión Social del gobierno del estado,
Alberto López Rosas, quien destacó el hecho de que las relaciones obrero-patronales fueron positivas ya que no hubo huelgas.
Asimismo, indicó que para el 2014, el panorama apunta alentador, pues con los más de 30 mil millones de pesos que se aplicará en el estado la Federación para reconstruir las zonas afectadas por las lluvias de septiembre pasado, hay la garantía de que habrá empleo y que con ello las familias tendrán asegurado su ingreso económico y su sustento.
En términos generales, López Rosas consideró que los índices de desempleo no se dispararon y que se mantuvo en un 2.8 por ciento, contra el 5 por ciento de la media nacional.
Además, mencionó, a pesar de la contingencia provocada por las lluvias a mediados de septiembre pasado, “la planta productiva se mantuvo, además de que hemos tratado de conciliar intereses entre sindicatos y empresas y hemos avanzado en las negociaciones con las que hemos evitado huelgas principalmente en los destinos turísticos del estado”, por lo que confió en que en la temporada vacacional que está por iniciar se pueda incrementar la ocupación hotelera por el bien del estado”.
En cuanto al panorama que pinta para el estado en el 2014, reiteró que los 30 mil millones de pesos que el gobierno de la República invertirá para la reconstrucción de las zonas afectadas por las lluvias son una garantía de que habrá trabajo y de que las familias tendrán un ingreso.
Cuestionado respecto a la exportación de mano de obra tanto a los estados del norte del país como a los Estados Unidos, el secretario del Trabajo del gobierno del estado señaló que el fenómeno migratorio, principalmente la movilidad laboral, es permanente y no refiere ningún reproche, ya que simplemente son intercambios en materia de mano de obra, pues incluso recordó que cuando en Acapulco comenzaron a construirse los hoteles de gran turismo llegaron albañiles, carpinteros de otros estados. (Baltazar Jiménez Rosales)

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