Sentimientos encontrados en vecinos de Azinyahualco, por su reubicación

Entre los habitantes de Azinyahualco, municipio de Chilpancingo, hay sentimientos encontrados: de alegría y satisfacción, porque el Ayuntamiento presidido por Mario Moreno Arcos ya comenzó a negociar el terreno para reubicar a la comunidad, pero también de tristeza, melancolía y nostalgia, porque ya no regresarán al
lugar en el que vivieron, pues resultó tan afectado por las lluvias acarreadas por la tormenta “Manuel” y el huracán “Ingrid” que ya es inhabitable.
Entrevistado ayer a su llegada a la sede del Ayuntamiento capitalino, el comisariado ejidal de Azinyahualco, Carlos Morales Anota, señaló que son un total de 322 personas pertenecientes a 90 familias las que conforman esta comunidad que ante el problema de no poder regresar a sus viviendas, están en la mejor disposición de ser reubicadas en otro lugar.
El problema que tienen tanto ellos como el Ayuntamiento presidido por Mario Moreno Arcos, apuntó, es que en el Ejido de Azinyahualco no hay un terreno adecuado para fincar el “Nuevo Azinyahualco”, por lo que el alcalde ya negocia con la comunidad de Zoyatepec un terreno para proceder a la reubicación.
En este caso, de acuerdo a un boletín que el fin de semana distribuyó la Dirección de Comunicación Social del Ayuntamiento de Chilpancingo, el predio en mención tiene una extensión superior a las siete hectáreas y está ubicado en el punto conocido como “Buenavistita”.
Por el momento, mencionó el comisariado ejidal Morales Anota, los 322 habitantes de Azinyahualco permanecen albergados en El Ocotito en espera del acuerdo que tomen las autoridades municipales con los ejidatarios de Zoyatepec, de quienes reconoció la actitud solidaria que han mostrado ante la desgracia por la que atraviesan.
La petición que hizo el comisariado ejidal es que también en el Nuevo Azinyahualco se construya las escuelas que ya tenían como el Jardín de Niños, la Primaria y una Telesecundaria, así como canchas deportivas, la Iglesia y los servicios básicos.
Morales Anota expresó que debido a que el ejido de Azinyahualco está decretado por el gobierno federal como una reserva forestal protegida, sus habitantes mantendrán los programas de conservación que ya venían impulsando. (Baltazar Jiménez Rosales)