Damnificados se niegan a salir de escuelas-albergue
Damnificados de diversas colonias que fueron albergados en la Escuela Primaria “José Martí” de esta capital, se negaron rotundamente a abandonar dichas instalaciones para que este lunes se reactivara el servicio educativo, por el contrario realizaron una manifestación en exigencia de atención hasta que tengan
condiciones para regresar a sus hogares.
Los albergados señalaron que este lunes personal del Ejército se presentó a la “José Martí” y les indicaron que tendrían que desalojar el inmueble en el que se tiene que reiniciar las clases a más tardar este martes, sin embargo ellos respondieron que no tienen a donde ir porque sus casas fueron destruidas por el agua y por ello se quedarían hasta que la situación cambie.
En protesta por la presión oficial sacaron algunas de sus cosas a la avenida 17 de Octubre, frente a la escuela y dijeron que si no siguen recibiendo atención de las autoridades instalarán un campamento en ese lugar y de todas formas se va a bloquear el acceso a la primaria.
Más tarde les hicieron la oferta de reubicar el albergue en un salón de fiestas al sur de la capital, sin embargo se oponen, porque temen que los apoyos gubernamentales no lleguen a sus manos. ESCUELA ANÁHUAC.
La Escuela Primaria “Primer Congreso de Anáhuac” que en su momento albergó a cerca de 700 damnificados procedentes de la comunidad de San Vicente, desde el sábado quedó liberada y una vez que fue limpiada este martes reiniciaría labores. En esta escuela el sábado que los damnificados se disponían a abandonar las aulas, se generó un altercado con el personal del Pentatlón que fueron quienes administraron los recursos durante los días que operó el albergue, pues ellos se negaron a entregar a los refugiados los víveres colectados argumentando que ellos, el Pentatlón, los seguirían administrando, mientras los damnificados querían les fueran distribuidos en ese instante.
Al final el conflicto fue solucionado por el Ejército quienes indicaron que cuando los damnificados se mueven tiene que hacerlo junto con todos sus víveres, pues son recursos que ya se destinaron para ellos, y al sitio donde fueran los necesitarían, si bien les aclararon que no son ellos (ni organización política alguna) quienes habrán de administrarlos.
Ahora se ubican en el albergue que se encuentra la Unidad Deportiva “Angel Aguirre Rivero”, antes CREA. Su estancia en esta capital se espera que dure por varias semanas más, pues su pueblo se encuentra convertido en una zona de muy alto riesgo y la propuesta de las autoridades es reubicarlos en un punto conocido como Coapanguito, sin embargo la propuesta tendrá que ser avalada por la asamblea del pueblo y de ser aprobada después tendrían que hacerse estudios técnicos geológicos. KINDER DAÑADO. Otra institución que no pudo reiniciar clases ayer es el Jardín de Niños “Ramón Alarcón Jiménez”, donde el personal regresó a todos los niños por considerar que se podrían estar exponiendo a riesgos.
Los docentes señalaron que desde hace dos semanas solicitaron que personal de Protección Civil revisara una barda que divide su plantel con otro jardín de niños, misma que presenta cuarteaduras, humedad y temen que por la alta concentración de humedad se derrumbe.
"En tanto no haya una revisión y un dictamen que nos indique que es seguro trabajar aquí, no permitiremos que los niños se expongan, en cuanto nos den el dictamen empezaremos a trabajar".
La barda hace más de 35 años que fue construida y es evidente que requiere de atención, pues incluso padres de familia que son albañiles la revisaron con la plomada y coincidieron en que ha perdido la vertical y tiene un desnivel que se inclina hacia su jardín. JARDIN ROBERT OWEN En lo que se refiere al Jardín de Niños “Robert Owen” que se localiza a un costado de la barranca Alpoyeca, su entrada se encuentra convertida en un río, por ello los maestros determinaron que reiniciarán clases hasta el próximo miércoles y su entrada será por la parte alta del edificio.
Este plantel se inundó, sin embargo una vez que el nivel ha bajado, las instalaciones fueron aseadas y el inmueble no tuvo mayores daños. Otras escuelas como la de la colonia Omiltemi, donde también operó un albergue ya reinició labores una vez que los damnificados fueron regresados muchos a sus hogares y otros llevados a los albergues que siguen funcionando. (Por Abel Miranda Ayala)
condiciones para regresar a sus hogares.
Los albergados señalaron que este lunes personal del Ejército se presentó a la “José Martí” y les indicaron que tendrían que desalojar el inmueble en el que se tiene que reiniciar las clases a más tardar este martes, sin embargo ellos respondieron que no tienen a donde ir porque sus casas fueron destruidas por el agua y por ello se quedarían hasta que la situación cambie.
En protesta por la presión oficial sacaron algunas de sus cosas a la avenida 17 de Octubre, frente a la escuela y dijeron que si no siguen recibiendo atención de las autoridades instalarán un campamento en ese lugar y de todas formas se va a bloquear el acceso a la primaria.
Más tarde les hicieron la oferta de reubicar el albergue en un salón de fiestas al sur de la capital, sin embargo se oponen, porque temen que los apoyos gubernamentales no lleguen a sus manos. ESCUELA ANÁHUAC.
La Escuela Primaria “Primer Congreso de Anáhuac” que en su momento albergó a cerca de 700 damnificados procedentes de la comunidad de San Vicente, desde el sábado quedó liberada y una vez que fue limpiada este martes reiniciaría labores. En esta escuela el sábado que los damnificados se disponían a abandonar las aulas, se generó un altercado con el personal del Pentatlón que fueron quienes administraron los recursos durante los días que operó el albergue, pues ellos se negaron a entregar a los refugiados los víveres colectados argumentando que ellos, el Pentatlón, los seguirían administrando, mientras los damnificados querían les fueran distribuidos en ese instante.
Al final el conflicto fue solucionado por el Ejército quienes indicaron que cuando los damnificados se mueven tiene que hacerlo junto con todos sus víveres, pues son recursos que ya se destinaron para ellos, y al sitio donde fueran los necesitarían, si bien les aclararon que no son ellos (ni organización política alguna) quienes habrán de administrarlos.
Ahora se ubican en el albergue que se encuentra la Unidad Deportiva “Angel Aguirre Rivero”, antes CREA. Su estancia en esta capital se espera que dure por varias semanas más, pues su pueblo se encuentra convertido en una zona de muy alto riesgo y la propuesta de las autoridades es reubicarlos en un punto conocido como Coapanguito, sin embargo la propuesta tendrá que ser avalada por la asamblea del pueblo y de ser aprobada después tendrían que hacerse estudios técnicos geológicos. KINDER DAÑADO. Otra institución que no pudo reiniciar clases ayer es el Jardín de Niños “Ramón Alarcón Jiménez”, donde el personal regresó a todos los niños por considerar que se podrían estar exponiendo a riesgos.
Los docentes señalaron que desde hace dos semanas solicitaron que personal de Protección Civil revisara una barda que divide su plantel con otro jardín de niños, misma que presenta cuarteaduras, humedad y temen que por la alta concentración de humedad se derrumbe.
"En tanto no haya una revisión y un dictamen que nos indique que es seguro trabajar aquí, no permitiremos que los niños se expongan, en cuanto nos den el dictamen empezaremos a trabajar".
La barda hace más de 35 años que fue construida y es evidente que requiere de atención, pues incluso padres de familia que son albañiles la revisaron con la plomada y coincidieron en que ha perdido la vertical y tiene un desnivel que se inclina hacia su jardín. JARDIN ROBERT OWEN En lo que se refiere al Jardín de Niños “Robert Owen” que se localiza a un costado de la barranca Alpoyeca, su entrada se encuentra convertida en un río, por ello los maestros determinaron que reiniciarán clases hasta el próximo miércoles y su entrada será por la parte alta del edificio.
Este plantel se inundó, sin embargo una vez que el nivel ha bajado, las instalaciones fueron aseadas y el inmueble no tuvo mayores daños. Otras escuelas como la de la colonia Omiltemi, donde también operó un albergue ya reinició labores una vez que los damnificados fueron regresados muchos a sus hogares y otros llevados a los albergues que siguen funcionando. (Por Abel Miranda Ayala)
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