Retienen miembros de la UPOEG a cerca de 100 militares en El Pericón

Habitantes de la comunidad de El Pericón Municipio de Tecoanapa, que participan con el movimiento de autodefensa impulsado por la Unión de Pueblos y Organizaciones de Guerrero (UPOEG), bloquearon la carretera federal Tierra Colorada-Ayutla, así como la Tierra Colorada-Chilpancingo, y hasta la noche de
ayer mantenían retenidos a un centenar de elementos militares en contra de quienes vociferan “tienen nexos con la delincuencia organizada”. De acuerdo con el dirigente de la UPOEG, Bruno Plácido Valerio, la acción de bloquear la carretera y con ello impedir la movilidad de los militares, se inició alrededor de las tres de la mañana cuando vecinos del lugar se percataron que civiles vestidos con ropa oscura se reunieron con el comandante del grupo, a quien sólo identifican por el apellido Prom (o Brown). Añadió que los militares trataron de detener a cuatro de los integrantes de la Policía Ciudadana que realizaban recorridos durante la madrugada y en respuesta el pueblo salió y les bloqueó la carretera para que no pudieran llevárselos, con ello lograron su liberación, pero las fuerzas castrenses se negaron a regresar las cuatro armas, además de otras que se han retenido en el pasado, mismas que suman 12, entre pistolas, escopetas y rifles. Una vez iniciado el bloqueo y confirmado que se tenían retenidos a todos los integrantes del destacamento de El Pericón, se enviaron grupos de otros lugares en su apoyo, mismos que se trasladaron en camiones Dina, Hummer, y un vehículo blindado y artillado, sin embargo al llegar al sitio, también fueron rodeados por los pobladores y vehículos para impedirles el paso. Posteriormente un helicóptero militar sobrevoló el sitio a muy baja altura, realizó alrededor de 15 vueltas sobre la zona y después se retiró. Bruno Plácido, “acusó” al comandante Prom (o Brown), de tener relación con un grupo de hombres que llegan a visitarlo de noche y de haberles entregado a éstos, varias personas que fueron detenidas por los militares, incluso refirieron que en un punto cercano al campamento militar, se localizó un sitio donde se habrían practicado actos de tortura. Ante esta circunstancia los miembros del Consejo de Seguridad y Justicia, determinaron exigir al Ejército dos cosas, primero que regrese las armas que les fueron confiscadas a sus compañeros y esa parte no era negociable, pues mientras no las devolvieran el bloqueo carretero que les impide moverse continuaría. En segundo término, se exigió una investigación al comandante del destacamento militar, dado que se presume su relación con bandas delincuenciales, "nosotros no estamos en contra de la presencia del Ejército siempre y cuando ellos se conduzcan con honestidad y respeto para los miembros de la policía ciudadana", dijo Bruno Plácido. Mientras tanto muchos de los habitantes de la comunidad del Pericón, denunciaron que han sido víctimas de hostigamiento, que los militares han encañonado incluso a mujeres sin motivo alguno. Por la tarde al bloqueo que inició desde muy temprana hora en El Pericón se sumó otro bloqueo carretero en Tierra Colorada y amenazaron con que si no hay atención pronta al problema, el bloqueo se extendería a la Autopista del Sol. (Abel Miranda Ayala)