Defiende diputado del PT su postura contra el Mando Único

“Estar en contra del mando único no es una ocurrencia”, señaló el presidente de la Comisión de Derechos Humanos del congreso Jorge Salazar Marchan quien reiteró su postura respecto a este modelo. El representante del Partido del Trabajo en la 60 legislatura recordó que cuando existió el Mando Único en
Guerrero “se llamó Acosta Chaparro”. Salazar Marchan, dijo que ya se tiene ese precedente en Guerrero del llamado mando único en donde Arturo Acosta Chaparro tenía el control sobre corporaciones como bomberos y protección civil, lo que considero peligro “centralizar o delegar todas las funciones o atribuciones a una sola persona para hacer eso”. ¿Es una medida desesperada? Se le pregunto, y aseguró que primero se debe transitar por la vía de reconocer el derecho que tiene la ciudadanía “a su seguridad” es decir, el modelo de organizaciones como la Coordinadora Regionales de Autoridades Comunitarias (CRAC) “es novedosa y valida”. El representante social reconoció que si bien es cierto que la CRAC ha cometido excesos en la implementación de su sistema de seguridad comunitaria, estos abusos “son mínimos, no los justifico pero son mínimos en relación a los excesos que ha tenido la policía”. Salazar Marchan recordó casos como el sucedido en Tultepec, Estado de México “que por una mentada de madre asesinan a tres niños, el pueblo de Tultepec se levanta, va y le quema las patrullas y hace un sainete de dimensiones mayores pues entonces hay de excesos a excesos”. Cuestionado sobre los señalamiento que se han vertido en contra de la CRAC de tener vínculos con la delincuencia organizada, el representante popular acepto que durante una asamblea ya se hablaba de personas que integraban la policía comunitaria tenían antecedentes penales “es una circunstancia de uno o dos elementos, pero no es el todo”, y señalar que si se encuentran infiltrados o financiados solo basta ver el tipo de armamento que tienen en otras latitudes como Michoacán o en Tierra Caliente donde portan armas de grueso calibre mientras que en Guerrero las armas que traen son de muy bajo calibre. Dijo que es preocupante que en las corporaciones policiacas legalmente establecidas no cuenten con protocolos “eso si es preocupante” debido a que son instituciones que cuentan con recursos aunado a la vida institucional con que cuentan, mientras que las policías comunitarias no cuentan con estos protocolos, de ahí los excesos que muchas veces cometen. En cuanto al papel del ejército para con las policías comunitarias, Salazar Marchan cuestiono el por qué no desarma a los carteles (el ejército), y la poca sensibilidad que han mostrado los mandos castrenses para entender la situación que se vive en Guerrero ya que la policía “machetera, la policía de la localidad siempre ha existido, es parte de la idiosincrasia del estado”, finalizó. (NOTYMAS)