Una gran actividad de la feligresía católica en el Domingo de Ramos
Feligreses católicos realizaron al menos ocho procesiones de Domingo de Ramos en esta capital del estado como parte de las actividades conmemorativas de la Semana Santa y la representación de la Pasión y Muerte de Jesucristo.
Las procesiones iniciaron en diversos puntos de la ciudad desde muy temprana hora y
culminaron en los templos, donde se oficiaron las misas respectivas y la bendición de palmas, lo que de acuerdo con feligreses católicos, representa la entrada triunfal de Jesús a Jerusalén. Entre las procesiones más tempraneras, estuvo la de la catedral de la Asunción de María que inició alrededor de las siete y media de la mañana, para culminar con una misa a las nueve en la explanada de la plaza Primer Congreso de Anáhuac. Otras procesiones se hicieron en los barrios tradicionales y en colonias como la del PRI, San Juan, Izazaga, y en el mercado Baltazar R. Leyva Mancilla, sin que en ninguna de las concentraciones se registrara algún incidente. En las procesiones, los feligreses portaron palmas tejidas y decoradas, que fueron bendecidas como parte de la actividad litúrgica, por lo que la comercialización de estas plantas fue un común denominador. Con la actividad del Domingo de Ramos se inician las actividades formales de la Semana Santa que, como es tradición, sus días más intensos serán el Jueves Santo en que se realiza el “lavatorio de pies” y la aprehensión de Jesucristo; el Viernes Santo, cuando se realiza la escenificación de la Pasión y Muerte de Jesucristo; la misa de gloria, el Sábado en la noche cuando se enciende el fuego nuevo, y finalmente las misas de resurrección el domingo, que es cuando culminan las actividades religiosas relativas a la semana “mayor”. El sacerdote, Víctor Manuel Aguilera Gómez, Vicario General de la Diócesis Chilpancingo-Chilapa dio a conocer que este año hubo mayor participación de los fieles católicos, y aseguró que muchos de los feligreses le externaron la idea de orar porque regrese la paz a la ciudad. Reconoció que actualmente el estado pasa por una situación muy complicada en materia de seguridad, lo que ha generado la reacción de la población que pide a través de diferentes medios el cese a la violencia e inseguridad. Indicó que la visita de los miles y miles de fieles católicos que asistieron a los diferentes templos de la ciudad para bendecir sus ramos, significa que la ciudadanía aún tiene la esperanza de recuperar la tranquilidad y darle fin a los hechos violentos que diariamente se registran en todo el estado. Desde el día sábado muchas personas se instalaron en los alrededores de las iglesias de la capital para comercializar palmas tejidas que iban desde los 20 hasta los 60 pesos cada una, dependiendo del tamaño y la elaboración que tenían. (Abel Miranda Ayala)
culminaron en los templos, donde se oficiaron las misas respectivas y la bendición de palmas, lo que de acuerdo con feligreses católicos, representa la entrada triunfal de Jesús a Jerusalén. Entre las procesiones más tempraneras, estuvo la de la catedral de la Asunción de María que inició alrededor de las siete y media de la mañana, para culminar con una misa a las nueve en la explanada de la plaza Primer Congreso de Anáhuac. Otras procesiones se hicieron en los barrios tradicionales y en colonias como la del PRI, San Juan, Izazaga, y en el mercado Baltazar R. Leyva Mancilla, sin que en ninguna de las concentraciones se registrara algún incidente. En las procesiones, los feligreses portaron palmas tejidas y decoradas, que fueron bendecidas como parte de la actividad litúrgica, por lo que la comercialización de estas plantas fue un común denominador. Con la actividad del Domingo de Ramos se inician las actividades formales de la Semana Santa que, como es tradición, sus días más intensos serán el Jueves Santo en que se realiza el “lavatorio de pies” y la aprehensión de Jesucristo; el Viernes Santo, cuando se realiza la escenificación de la Pasión y Muerte de Jesucristo; la misa de gloria, el Sábado en la noche cuando se enciende el fuego nuevo, y finalmente las misas de resurrección el domingo, que es cuando culminan las actividades religiosas relativas a la semana “mayor”. El sacerdote, Víctor Manuel Aguilera Gómez, Vicario General de la Diócesis Chilpancingo-Chilapa dio a conocer que este año hubo mayor participación de los fieles católicos, y aseguró que muchos de los feligreses le externaron la idea de orar porque regrese la paz a la ciudad. Reconoció que actualmente el estado pasa por una situación muy complicada en materia de seguridad, lo que ha generado la reacción de la población que pide a través de diferentes medios el cese a la violencia e inseguridad. Indicó que la visita de los miles y miles de fieles católicos que asistieron a los diferentes templos de la ciudad para bendecir sus ramos, significa que la ciudadanía aún tiene la esperanza de recuperar la tranquilidad y darle fin a los hechos violentos que diariamente se registran en todo el estado. Desde el día sábado muchas personas se instalaron en los alrededores de las iglesias de la capital para comercializar palmas tejidas que iban desde los 20 hasta los 60 pesos cada una, dependiendo del tamaño y la elaboración que tenían. (Abel Miranda Ayala)
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