Un fracaso el macrosimulacro de sismo de 8.2 grados Richter;

Cuando menos unos cientos de muertos habría arrojado el sismo de 8.2 grados en la escala de Richter si realmente el mediodía de ayer se hubiera registrado, ya que mientras que en el edificio “Vicente Guerrero” la evacuación se registró en 5 minutos y 50 segundos, en el Palacio Municipal los empleados no respetaron las
instrucciones y en el todavía Palacio de la Cultura apenas una decena de trabajadores respondieron a la convocatoria del macrosimulacro. De acuerdo al anuncio hecho por el gobierno del estado, ayer, en punto de las 12 del día se activarían las alarmas para iniciar el macrosimulacro de sismo de 8.2 grados en la escala de Richter en todo el estado, sin embargo, la mencionada alarma únicamente sonó en el Palacio Municipal, pero no en el de la Cultura, mientras que en el edificio “Vicente Guerrero”, su única escalera fue insuficiente para que los cientos de trabajadores que ahí laboran pudieran evacuar con prontitud el inmueble En Chilpancingo este tipo de actividades se realizan tradicionalmente en el palacio de gobierno por ser el edificio donde se encuentra la mayoría de los trabajadores estatales, sin embargo por estar tomado por el magisterio movilizado se optó por llevar el centro de actividades al edificio Vicente Guerrero, localizado en el primer cuadro de la capital. La evacuación no fue sorpresiva, los trabajadores sabían que a las 12 del día tendrían que abandonar el inmueble de una forma ordenada, por ello la mayoría tuvo tiempo para preparar sus cosas con anticipación con el fin de estar listos para salir a la hora indicada. Sin embargo, en las escaleras se formó un cuello de botella en el que con toda calma los empleados esperaron a que les tocara el turno de bajar, por ello al final del desalojo el cronómetro marcó 5 minutos y 50 segundos, lo que representa que en caso de un derrumbe por el sismo los muertos serían muchos, dado que el sismo duró sólo 50 segundos. Tras sacar a todo el personal en el escenario aparecieron los cuerpos de seguridad y rescate, que ayudaron a los supuestos lesionados a salir en camillas y rapeleo; luego ingresaron militares con un perro amaestrado en la búsqueda de personas, realizaron un recorrido para garantizar que no hubiera personas atrapadas. Entre los datos curiosos que se registraron es que mientras policías, bomberos, rescatistas y militares cercaron el edificio y trasladaron a todo el personal hasta la explanada del zócalo, a nadie se le ocurrió retirar a vendedoras que se encuentran justo en la entrada del inmueble, quienes si el sismo hubiera sido real, se mantendría en un serio riesgo, exponiendo su vida. Alrededor de las 12 del día con 45 minutos el simulacro se dio por concluido y el personal del edificio Vicente Guerrero, pudo regresar a sus actividades cotidianas. De acuerdo con el subsecretario de protección civil en el municipio, Alfredo Cuenca Marino, en el operativo participaron un centenar de elementos de los cuerpos de seguridad y rescate, y se desalojaron 700 personas del inmueble, se aplicaron acciones para rescate de lesionados, y en el caso de rapel se utilizó la técnica en el supuesto de que personas hubieran quedado atrapadas y las escaleras destruidas. Cuestionado sobre el largo tiempo que se tardaron en desalojar, aseguró que fue lo que se previó por el tamaño del edificio y sobre las vendedoras que a nadie se le ocurrió retirar, reconoció que fue una omisión que se cometió por parte del Comité Interno de Protección Civil, que al momento de organizar la salida del personal debieron llevarse también a las vendedoras que efectivamente se encontraban en una zona de muy alto riesgo y debieron ser invitadas a participar, porque son seres humanos, que como prioridad deben tener el cuidado de su vida. El funcionario indicó que en Chilpancingo fueron cinco edificios gubernamentales en los que se desarrolló la evacuación, entre los que se cuenta el edificio Vicente Guerrero, el edificio Juan Álvarez, el Ayuntamiento, el Palacio de la Cultura y decenas de escuelas, centros comerciales e incluso domicilios particulares de personas que se enteraron del simulacro y evacuaron sus casa en la hora señalada. No obstante, en el todavía llamado palacio municipal, ahí en la plaza cívica Primer Congreso de Anáhuac, los empleados y público en general, si bien obedecieron las instrucciones de salir del inmueble bajo la consigna de “no corro, no empujo, no grito”, lo cierto es que la mayoría se quedó en el pasillo frontal del mismo inmueble edilicio, lo que hace imaginar que muchos de ellos habrían muerto o quedado malheridos a consecuencia de un macro sismo. En tanto, del Palacio de la Cultura cuando mucho salieron una decena de trabajadores, que prácticamente fueron “regañados por una elemento de Protección Civil por no tomar con seriedad el simulacro. Además los invitó a integrar su Comité Interno de Protección Civil. El simulacro se planeó para conmemorar un año de que se registrara un sismo con intensidad de 7.4 grados en escala de Richter que tuvo su epicentro en Pinotepa nacional y que causó daños en viviendas, escuelas y diversas construcciones en la zona de costa Chica de nuestra entidad, mismas que incluso a la fecha no terminan de repararse a pesar de que se bajaron recursos del Fondo Nacional de Desastres. (Abel Miranda Ayala y Redacción)