Los robos en el zoológico, sólo una de tantas irregularidades

La pérdida de uno de los colmillos de marfil de la elefante Jenny, en el zoológico “Zochilpan” de esta capital, es sólo una de las muchas que se han tenido en el parque, ya que en el último año, de manera inexplicable desaparecieron dos boas constrictor, una computadora y además se ha causado la muerte de varias
especies. De acuerdo con un grupo de trabajadores inconformes por la forma en que la dirección atiende la pérdida del colmillo de la elefante, desde la llegada de la actual directora, Martha Elena Torres, se han presentado muchas situaciones anómalas. A manera de ejemplo citaron que del serpentario “desaparecieron” dos boas constrictor adultas de gran tamaño y en una de las ocasiones por arte de magia el animal “apareció” nuevamente en su jaula aunque en otra ocasión ya nunca volvieron a saber de él. Refirieron que sin lugar a dudas alguien que tiene acceso al área las sacó, pero difícilmente serán los animaleros que tienen muchos años trabajando en el sitio, que han dejado su vida cuidando a estos animales, aunque a pesar de ellos la dirección pretende culparlos de las desapariciones de estos animales. El caso más raro, por llamarle de alguna forma, fue la pérdida de una computadora que se encontraba resguardada bajo llave en el interior de la dirección, la cual fue robada sin violar chapas de las puertas y sin que se forzar ninguna cerradura. Del caso del colmillo de marfil, los empleados del Zoológico refirieron que la directora interpuso formal denuncia, por lo cual hace unos días un trabajador fue sacado del zoológico por dos agentes ministeriales y llevado a declarar a la agencia del Ministerio Público, “la directora trajo a los ministeriales y se llevaron a nuestro compañero algo que creemos que es irregular pues se encuentra dentro de su centro de trabajo y no había ningún citatorio u orden de aprehensión en su contra”. Tras declarar en el Ministerio Público el animalero del Zoológico fue liberado, sin embargo ello ha generado temor entre el resto del personal, pues aseguran que la directora busca culpar a alguien sin importarle el daño que pueda generar, “Hemos pedido el apoyo de la dirigencia del SUSPEG para que defiendan nuestros derechos porque pertenecemos a este sindicato y esperamos tener el respaldo de nuestra dirigencia”, dijeron los quejosos. Señalaron que lo más triste es que el personal del área de medicina veterinaria que la directora contrató, está integrado por personas inexpertas que están aprendiendo con los animales de este lugar y ello ha derivado en varias muertes, “por citar un ejemplo, apenas tenían días de haber llegado cuando le inyectaron una sobredosis de insulina a los monos ardilla que se encontraban casi a la entrada del parque y fallecieron todos”. Además, criticaron el hecho de que la directora del parque zoológico ordenara cerrar con cadenas y candados las dos salidas de emergencia que había: la que da hacia el encauzamiento del río Huacapa y la que da al callejón Arturo Martínez Adame, ya que en caso de presentarse alguna contingencia no habrá forma evacuar rápidamente al personal y al público asistente. (Abel Miranda Ayala)

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