Nada nuevo bajo el sol; por un olvido rompen una calle que costó millones

Apenas dos años duró el gusto a los capitalinos de tener un par de calles embellecidas al cien por ciento, pues al andador zapata que en el año 2010, se le invirtieron muchos millones de pesos para dejarla relumbrante, la fracturaron para que una tienda pudiera colocar cableado eléctrico. En el año
2010, la remodelación del andador zapata y la Avenida Juárez, se anunció con bombo y platillo, pues se trataba de dos obras de ingeniería de primer nivel que incluirían la colocación de ductos subterráneos para eliminar el cableado aéreo, además de pintado uniforme de todas las fachadas, colocación de anuncios idénticos para todos los comercios, nuevas y modernas luminarias y por supuesto la repavimentación que en el caso del andador Zapata se hizo con una especie de adoquines. Desde entonces las calles lucieron casi perfectas, hasta hace unos días en que para colocar cableado de una tienda comercial, el andador Zapata fue abierto y por ende el adoquín cortado, en al menos 50 metros, por medio de ancho. Los comerciantes que tiene negocios en la zona, indicaron que es un absurdo de parte del ayuntamiento permitir que se realicen estas obras en primer lugar porque un pavimento fracturado es claro que en el futuro tendrá hundimientos, además de que no que no quedará completamente igual y ello demerita el aspecto que tenía hasta antes de las obras, cuando se trataba de una sola pieza toda la calle. Además de que es injusto que otra vez tengan que sufrir polvaredas, pues hace dos años cuando se construyó la obra fueron varios meses de sufrir, “ahorita otra vez nuestros productos se llenan de tierra porque en días pasados ocuparon una máquina para cortar el pavimento que llenó todo de tierra, aunque estuvieran cerrado, ya que el polvo que produjo es muy fino y se metió”. Señalaron que muchos tuvieron pérdidas pues por ejemplo ropa de color blanco quedó inservible, y no hay a quien hacer un reclamo, “pero la pérdida económica es poca con el sentimiento de impotencia que nos deja ver que una obra que costó millones de pesos de dinero público hoy se destruya porque no dejaron las entradas para esa tienda, que mucho se ha dicho que pertenecen al ex gobernador Zeferino Torreblanca”. La zanja que se abrió en el andador Zapata entre las calles Galo Soberón y Galeana, actualmente se encuentra rellenada con tierra, hasta unos cinco centímetros abajo del nivel del pavimento, lo que incluso representa un riesgo para los peatones pues no hay ningún tipo de señalización. (Abel Miranda Ayala)

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