Revela Alarcón que fue hostigado por el Ejército y la Policía Federal

El presidente de la Comisión Estatal de Defensa de los Derechos Humanos (Coddehum), Juan Alarcón Hernández, aseguró que ya sintió en carne propia la intimidación, represión y hostigamiento por parte del Ejército Mexicano y la Policía Federal Preventiva, por lo cual criticó una vez más la
estrategia impulsada por el gobierno federal contra la delincuencia organizada. Fue durante la instalación de la Comisión de Derechos Humanos del Congreso del Estado, que preside el petista Jorge Salazar Marchán, que el ombudsman guerrerense se atrevió a revelar públicamente que durante el gobierno de Zeferino Torreblanca Galindo militares y policías federales sitiaron su domicilio por más de cinco horas. “Muchos supieron que en el sexenio pasado fui víctima de una intimidación por parte del Ejército y de las policías federales en mi domicilio particular. “Desde las 23:30 horas hasta las 3 de la mañana intentaron meterse a mi domicilio, pero no era tanto para introducirse sino para intimidarme, y no obstante eso continué con mis declaraciones y pronunciamientos en contra de elementos que realizan actos atentatorios de todas las libertades y de todos los derechos humanos”, expresó. Y fiel a su postura con relación a la estrategia impulsada por el gobierno federal contra la delincuencia organizada, Alarcón Hernández expresó que si los derechos humanos están en crisis no es porque el Estado lo quiera sino porque la guerra contra las bandas del crimen organizado no tuvo una estrategia y tampoco se hizo una evaluación al respecto: “el gobierno mexicano se lanzó como el borras y al valor mexicano, como se dice coloquialmente, y las consecuencias son policías corruptos pero además represivos”. Asimismo, aumentó su crítica contra la Policía Federal al calificarla de “temeraria”, ya que sus elementos, con tal de llevar a cabo sus órdenes atacan a todo mundo y en este sentido puso como ejemplo el ataque que perpetraron contra el embajador de los Estados Unidos en México y la detención de los seis estudiantes de la Unidad Académica de Medicina Veterinaria de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAG), en Coyuca de Catalán y muchos otros casos. Añadió que ante este tipo de casos, las comisiones de Derechos Humanos “nos sentimos impotentes frente al poder avasallador de éstos cuerpos de seguridad”, por lo que exigió a la Policía Federal convertirse en un cuerpo de seguridad ciudadana, de protección al ciudadano, no para proteger intereses bastardos”. (Baltazar Jiménez Rosales)