Hoy inicia el Séptimo festival del Pozole y el mezcal: Rigo
Aunque la producción del Mezcal se logró a partir de la mezcla de culturas que se origina con la llegada de los españoles al continente Americano, hoy la producción de esta bebida que se considera “espirituosa”, tiene una denominación de origen para nuestro país, de tal forma que sólo en México
se puede producir Mezcal y el de Guerrero, es el que se ha considerado como el de mayor calidad, por ello en esta capital se realiza a partir de este jueves la séptima edición del Festival del Pozole y el Mezcal. De acuerdo con Rigoberto Acosta González, presidente del Consejo Nacional del Mezcal, la bebida se ha considerado espirituosa dado que, por sus propiedades, lo mismo se utiliza para conmemorar una festividad, como un cumpleaños, un nacimiento o un matrimonio, que para situaciones de duelo por la muerte de un ser querido, asimismo en festividades religiosas y populares, por ello a esta bebida se le da una acepción de ser espirituosa. Acosta González comentó que la Historia del Mezcal se asocial a la historia de los destilados en el continente Americano, “a la llegada de los españoles en nuestro país, empiezan a generar procesos de fermentación primeramente con piña, sobre todo en la zona de Veracruz, luego con coco y finalmente junto con la cultura nativa empiezan a descubrir que el agave, particularmente el cupeatra, podía generar procesos de fermentación a partir de la cocción en los hornos, muy similares a los que se usaban para preparar algunas comidas como la carne en las llamadas barbacoas de pozo”. Entonces es ahí cuando los españoles hacen un gran aporte a nuestra cultura con la introducción del alambique, que es un instrumento que usaban los árabes para hacer ciertos destilados, “ eso le viene a dar un toque mucho más ágil para la producción de alcohol, y es entonces desde ahí una actividad muy ligada a los procesos y a las tradiciones culturales de los pueblos, al grado tal que ahora llegamos a un proceso donde en el año 94 la organización mundial del comercio, le otorga a México la denominación de origen”. La denominación de origen con la que actualmente cuenta el pueblo de México para la producción del Mezcal, es la distinción para que sólo México pueda producir estos destilados, “es también un sentido reconocimiento, atendiendo a todo este bagaje cultural histórico, de tradición, y de la asociación del consumo de mezcal a la fiesta y también al duelo”. Para los productores de mezcal en México, obtener la denominación de origen fue un logro importante, ya que a partir de ahí se obliga a el gobierno mexicano a emitir la norma oficial mexicana 070, que se convierte en un instrumento que plasma las condiciones de producción, “es como el protocolo para la producción y elaboración de mezcal, donde un elemento fundamental es que para usar el término mezcal debe venir ese producto del destilado de agave, y respetar los protocolos para el destilado, es decir que tenga que ser en alambique y que tenga que ser martajado el maguey cocido y puesto a fermentar en un reposo tal que permita que haya una composición físico química, que se dé la transformación de los azúcares y finalmente llevado al destilado donde esos azúcares se convierten en alcohol”. Esta norma oficial, obliga también a los productores a insertarse en un proceso de certificación que garantice la presencia y calidad de ciertas características en el destilad, “la certificación es una valoración técnico científica de laboratorio, y con instrumentos que nos digan de todas las propiedades que el mezcal tiene cuáles son las más amigables con el ser humano y por lo tanto deben permanecer en el cuerpo del producto, de tal suerte que regula alcoholes superiores, regula su metanol es, regula el grado de acidez, regula impurezas”. Con estos procesos de certificación, de acuerdo con el presidente nacional del Cemezcal, “cuando nosotros decimos mezcal certificado, decimos que es un mezcal totalmente seguro y apto para el consumo humano, y que el único efecto que va a producir es que te va emborrachar y que no deba producir ninguna o otra alteración en el organismo y que si es mezcal certificado no te debe de propiciar cruda siempre y cuando lo consuma de manera que no vaya combinada con otros productos, es decir el mezcal debe por esencia consumirse sólo y no en combinación con sabores o con refrescos de dulce o con cerveza o con cualquier otra cosa, tiene que tomarse sólo y garantizado que no hace cruda”. El mezcal de Guerrero se ha considerado como el de mayor calidad nacional, porque en estas tierras sureñas se produce de manera natural, una especie de maguey, que tiene propiedades superiores a las producidas en otras entidades, “nuestro mezcal es mejor incluso que el de Oaxaca, sólo que en esa entidad tiene más tiempo de haber iniciado su proceso de certificación y la inserción de marcas en el mercado, sin embargo el mezcal Guerrerense se está posicionando en zonas de consumidores de alto nivel, como una bebida Premium, no es la bebida barata, es una bebida para consumidores exigentes”. Las cifras de esta organización indican que en Guerrero se producen un millón 700 mil litros de mezcal y de éstos sólo 400 mil son certificados, el resto se vende de forma artesanal, sin embargo ello no significa que sea un mal producto, pues la denominación de origen justamente se logró gracias a estos productores rústicos, que han preservado por siglos la tradición del destilado, sin embargo ahí el llamado a los consumidores para que cuando consuman mezcal no certificado sea de un mezcalero conocido, que tengan la seguridad de estar consumiendo algo sano y no productos químicos mezclados que asemejen el sabor del producto. Finalmente Rigoberto Acosta invitó a todo el pueblo de Guerrero para asistir este jueves a la Inauguración de la feria del Pozole y el Mezcal donde se exhibirán y comercializarán decenas de marcas Guerrerenses que ya están insertándose en el mercado Nacional e internacional, “habrá muchos espectáculos, artesanías, muestras de arte, danza y muchas actividades más, sin embargo el atractivo principal es que conozcan la bebida espirituosa que está fuertemente ligada a la cultura de nuestro pueblo. (AAbel Miranda Ayala)
se puede producir Mezcal y el de Guerrero, es el que se ha considerado como el de mayor calidad, por ello en esta capital se realiza a partir de este jueves la séptima edición del Festival del Pozole y el Mezcal. De acuerdo con Rigoberto Acosta González, presidente del Consejo Nacional del Mezcal, la bebida se ha considerado espirituosa dado que, por sus propiedades, lo mismo se utiliza para conmemorar una festividad, como un cumpleaños, un nacimiento o un matrimonio, que para situaciones de duelo por la muerte de un ser querido, asimismo en festividades religiosas y populares, por ello a esta bebida se le da una acepción de ser espirituosa. Acosta González comentó que la Historia del Mezcal se asocial a la historia de los destilados en el continente Americano, “a la llegada de los españoles en nuestro país, empiezan a generar procesos de fermentación primeramente con piña, sobre todo en la zona de Veracruz, luego con coco y finalmente junto con la cultura nativa empiezan a descubrir que el agave, particularmente el cupeatra, podía generar procesos de fermentación a partir de la cocción en los hornos, muy similares a los que se usaban para preparar algunas comidas como la carne en las llamadas barbacoas de pozo”. Entonces es ahí cuando los españoles hacen un gran aporte a nuestra cultura con la introducción del alambique, que es un instrumento que usaban los árabes para hacer ciertos destilados, “ eso le viene a dar un toque mucho más ágil para la producción de alcohol, y es entonces desde ahí una actividad muy ligada a los procesos y a las tradiciones culturales de los pueblos, al grado tal que ahora llegamos a un proceso donde en el año 94 la organización mundial del comercio, le otorga a México la denominación de origen”. La denominación de origen con la que actualmente cuenta el pueblo de México para la producción del Mezcal, es la distinción para que sólo México pueda producir estos destilados, “es también un sentido reconocimiento, atendiendo a todo este bagaje cultural histórico, de tradición, y de la asociación del consumo de mezcal a la fiesta y también al duelo”. Para los productores de mezcal en México, obtener la denominación de origen fue un logro importante, ya que a partir de ahí se obliga a el gobierno mexicano a emitir la norma oficial mexicana 070, que se convierte en un instrumento que plasma las condiciones de producción, “es como el protocolo para la producción y elaboración de mezcal, donde un elemento fundamental es que para usar el término mezcal debe venir ese producto del destilado de agave, y respetar los protocolos para el destilado, es decir que tenga que ser en alambique y que tenga que ser martajado el maguey cocido y puesto a fermentar en un reposo tal que permita que haya una composición físico química, que se dé la transformación de los azúcares y finalmente llevado al destilado donde esos azúcares se convierten en alcohol”. Esta norma oficial, obliga también a los productores a insertarse en un proceso de certificación que garantice la presencia y calidad de ciertas características en el destilad, “la certificación es una valoración técnico científica de laboratorio, y con instrumentos que nos digan de todas las propiedades que el mezcal tiene cuáles son las más amigables con el ser humano y por lo tanto deben permanecer en el cuerpo del producto, de tal suerte que regula alcoholes superiores, regula su metanol es, regula el grado de acidez, regula impurezas”. Con estos procesos de certificación, de acuerdo con el presidente nacional del Cemezcal, “cuando nosotros decimos mezcal certificado, decimos que es un mezcal totalmente seguro y apto para el consumo humano, y que el único efecto que va a producir es que te va emborrachar y que no deba producir ninguna o otra alteración en el organismo y que si es mezcal certificado no te debe de propiciar cruda siempre y cuando lo consuma de manera que no vaya combinada con otros productos, es decir el mezcal debe por esencia consumirse sólo y no en combinación con sabores o con refrescos de dulce o con cerveza o con cualquier otra cosa, tiene que tomarse sólo y garantizado que no hace cruda”. El mezcal de Guerrero se ha considerado como el de mayor calidad nacional, porque en estas tierras sureñas se produce de manera natural, una especie de maguey, que tiene propiedades superiores a las producidas en otras entidades, “nuestro mezcal es mejor incluso que el de Oaxaca, sólo que en esa entidad tiene más tiempo de haber iniciado su proceso de certificación y la inserción de marcas en el mercado, sin embargo el mezcal Guerrerense se está posicionando en zonas de consumidores de alto nivel, como una bebida Premium, no es la bebida barata, es una bebida para consumidores exigentes”. Las cifras de esta organización indican que en Guerrero se producen un millón 700 mil litros de mezcal y de éstos sólo 400 mil son certificados, el resto se vende de forma artesanal, sin embargo ello no significa que sea un mal producto, pues la denominación de origen justamente se logró gracias a estos productores rústicos, que han preservado por siglos la tradición del destilado, sin embargo ahí el llamado a los consumidores para que cuando consuman mezcal no certificado sea de un mezcalero conocido, que tengan la seguridad de estar consumiendo algo sano y no productos químicos mezclados que asemejen el sabor del producto. Finalmente Rigoberto Acosta invitó a todo el pueblo de Guerrero para asistir este jueves a la Inauguración de la feria del Pozole y el Mezcal donde se exhibirán y comercializarán decenas de marcas Guerrerenses que ya están insertándose en el mercado Nacional e internacional, “habrá muchos espectáculos, artesanías, muestras de arte, danza y muchas actividades más, sin embargo el atractivo principal es que conozcan la bebida espirituosa que está fuertemente ligada a la cultura de nuestro pueblo. (AAbel Miranda Ayala)
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