Es necesario regular las camionetas recolectoras de “la basura jefaaaa”
*De 40 que eran, ya suman 106 y corren rumores de que en breve
se incorporarán 100 más, alerta el secretario de Servicios Públicos
De 40 camionetas recolectoras de basura particulares que había en la ciudad, actualmente ya operan 106, reveló ayer el secretario de Servicios Públicos Municipales, Gregorio Arcos Vélez, quien reconoció que hay el rumor de que una organización —no especificó si de transportistas o de qué otro
tipo— pretende incorporar otras cien, aunque adelantó que la autoridad municipal no lo permitirá. Y ante el incremento de unidades de “la basura jefa” en la capital del estado, el funcionario municipal indicó que el Ayuntamiento que preside Mario Moreno Arcos buscará un mecanismo para regular su operación, ya que de una cooperación “voluntaria” que pedían, actualmente ya cuentan con una cuota o tarifa de acuerdo a la cantidad de basura que tiran las familias. Además, Goyo Arcos reveló asimismo que tanto se dejó crecer este problema que ahora ya hay unos verdaderos “pulpos” recolectores de basura, es decir, personas que tienen de dos, cinco hasta 20 camionetas recolectoras de basura. Y es que recordó que la recolección de basura por parte de particulares no fue concesionada por el Cabildo pues incluso esta actividad no representa un ingreso económico para el Ayuntamiento, a pesar de que los recolectores de basura utilizan el basurero municipal para depositar los desechos que recogen. Indicó asimismo que de comenzar como una alternativa de ingresos económicos para unas cuantas personas que buscaban el sustento familiar, ahora ya se convirtió en toda una actividad lucrativa, pues hay quienes tienen de dos, cinco o hasta 20 camionetas recolectoras de basura, reiteró. Arcos Vélez reconoció también que hay el “run run”, de que una organización, de la cual no especificó el tipo, busca meter otras 100 camionetas recolectoras de basura en Chilpancingo, lo cual tendrá que ser analizado por el Cabildo, aunque en lo particular él se manifestó en contra de que esto suceda. El secretario de Servicios Públicos aceptó que si bien es ilegal la recolección de basura por particulares a cambio de cuotas, finalmente es una actividad que ayuda a la autoridad municipal, por lo que se pronunció porque se busque un mecanismo que regule a los prestadores de este servicio, sobre todo porque ahora exigen el pago de cuotas por cantidad de basura que se tira, mientras que las unidades se encuentran en muy mal estado y no reúnen las condiciones para ello. Además, dijo, ahora ya no nada más andan en las colonias de la periferia o en lugares específicos de la ciudad, sino que ya se metieron al centro y en esas condiciones dan muy mal aspecto. Finalmente, aunque no quiso aceptar que los chilpancingueños son cochinos —me incluyo—, Goyo Arcos sí aceptó que les hace falta cultura en materia de limpieza, pues tiran la basura donde quieren y si se ven sorprendidos todavía se hacen los dignos. (Baltazar Jiménez Rosales)
De 40 camionetas recolectoras de basura particulares que había en la ciudad, actualmente ya operan 106, reveló ayer el secretario de Servicios Públicos Municipales, Gregorio Arcos Vélez, quien reconoció que hay el rumor de que una organización —no especificó si de transportistas o de qué otro
tipo— pretende incorporar otras cien, aunque adelantó que la autoridad municipal no lo permitirá. Y ante el incremento de unidades de “la basura jefa” en la capital del estado, el funcionario municipal indicó que el Ayuntamiento que preside Mario Moreno Arcos buscará un mecanismo para regular su operación, ya que de una cooperación “voluntaria” que pedían, actualmente ya cuentan con una cuota o tarifa de acuerdo a la cantidad de basura que tiran las familias. Además, Goyo Arcos reveló asimismo que tanto se dejó crecer este problema que ahora ya hay unos verdaderos “pulpos” recolectores de basura, es decir, personas que tienen de dos, cinco hasta 20 camionetas recolectoras de basura. Y es que recordó que la recolección de basura por parte de particulares no fue concesionada por el Cabildo pues incluso esta actividad no representa un ingreso económico para el Ayuntamiento, a pesar de que los recolectores de basura utilizan el basurero municipal para depositar los desechos que recogen. Indicó asimismo que de comenzar como una alternativa de ingresos económicos para unas cuantas personas que buscaban el sustento familiar, ahora ya se convirtió en toda una actividad lucrativa, pues hay quienes tienen de dos, cinco o hasta 20 camionetas recolectoras de basura, reiteró. Arcos Vélez reconoció también que hay el “run run”, de que una organización, de la cual no especificó el tipo, busca meter otras 100 camionetas recolectoras de basura en Chilpancingo, lo cual tendrá que ser analizado por el Cabildo, aunque en lo particular él se manifestó en contra de que esto suceda. El secretario de Servicios Públicos aceptó que si bien es ilegal la recolección de basura por particulares a cambio de cuotas, finalmente es una actividad que ayuda a la autoridad municipal, por lo que se pronunció porque se busque un mecanismo que regule a los prestadores de este servicio, sobre todo porque ahora exigen el pago de cuotas por cantidad de basura que se tira, mientras que las unidades se encuentran en muy mal estado y no reúnen las condiciones para ello. Además, dijo, ahora ya no nada más andan en las colonias de la periferia o en lugares específicos de la ciudad, sino que ya se metieron al centro y en esas condiciones dan muy mal aspecto. Finalmente, aunque no quiso aceptar que los chilpancingueños son cochinos —me incluyo—, Goyo Arcos sí aceptó que les hace falta cultura en materia de limpieza, pues tiran la basura donde quieren y si se ven sorprendidos todavía se hacen los dignos. (Baltazar Jiménez Rosales)
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