Vuelve la tranquilidad a las oficinas centrales de la Secretaría de Salud
El secretario de salud en el estado, Lázaro Mazón Alonso, aseguró que la dependencia ha vuelto a trabajar con normalidad luego de que se atendieron los reclamos del personal sindicalizado que el pasado viernes abandonó la dependencia por considerar que no había condiciones de seguridad,
debido a la presencia de hombres armados y personal de la Marina que resguardaban a un funcionario.
El pasado viernes la dirigencia estatal del Sindicato de Trabajadores de la Secretaría de Salud, decretó una suspensión de actividades de todo el personal de base que presta sus servicios en las oficinas generales, y aseguraron que no regresarían al menos hasta que se hubiera retirado al personal armado que cuida al subsecretario de finanzas, Arturo Sánchez Torres, que en días recientes fue amenazado por hombres armados.
Al respecto el secretario indicó que todo el personal está laborando ya de manera normal, “no hay ninguna queja del sindicato, ello es sinónimo de que se cumplieron los reclamos y el personal armado se retiró”.
Se le cuestionó que otra de las demandas del personal era que al subsecretario que fue amenazado se le llevara a oficinas alternas u otro edificio para que no representara un riesgo para el resto de los trabajadores, o en su defecto que se le destituyera, “el nombramiento de subsecretarios es una atribución del gobernador, por ende es algo en lo que no puedo interferir y hasta donde tengo conocimiento él se encuentra trabajando de manera normal, claro sin los elementos armados que lo custodiaba y el sindicato así lo aceptó”.
De acuerdo con versiones de trabajadores, el viernes 31 de agosto un comando armado irrumpió en la fiesta de cumpleaños de Sánchez Torres, que se realizó en casa del subsecretario de Planeación de la misma dependencia, Pablo Zapién Cortés, el grupo, de unas 15 personas, sometió a los asistentes a la fiesta, a las mujeres las obligó a meterse debajo de una mesa y a los varones los encerró en un baño, luego preguntaron por los dos funcionarios mencionados y por el secretario particular de Sánchez Torres, Elvis Cortés Salado, el subsecretario de Finanzas ya no se encontraba en el lugar, y a los otros dos les recogieron sus credenciales de elector luego de que revisaron una a una las de todos los varones.
En los días subsiguientes, a los funcionarios amenazados se les vio acompañados de escoltas armados, presuntamente miembros de la policía ministerial, y en los alrededores de las oficinas de la Secretaría de Salud frecuentemente se observaron elementos de la Marina, haciendo labores de resguardo, mismo que se retiró a partir de la protesta de los trabajadores el pasado viernes, pues consideraron que la presencia de hombres armados significaba un riesgo para la base trabajadora. (Abel Miranda Ayala)
debido a la presencia de hombres armados y personal de la Marina que resguardaban a un funcionario.
El pasado viernes la dirigencia estatal del Sindicato de Trabajadores de la Secretaría de Salud, decretó una suspensión de actividades de todo el personal de base que presta sus servicios en las oficinas generales, y aseguraron que no regresarían al menos hasta que se hubiera retirado al personal armado que cuida al subsecretario de finanzas, Arturo Sánchez Torres, que en días recientes fue amenazado por hombres armados.
Al respecto el secretario indicó que todo el personal está laborando ya de manera normal, “no hay ninguna queja del sindicato, ello es sinónimo de que se cumplieron los reclamos y el personal armado se retiró”.
Se le cuestionó que otra de las demandas del personal era que al subsecretario que fue amenazado se le llevara a oficinas alternas u otro edificio para que no representara un riesgo para el resto de los trabajadores, o en su defecto que se le destituyera, “el nombramiento de subsecretarios es una atribución del gobernador, por ende es algo en lo que no puedo interferir y hasta donde tengo conocimiento él se encuentra trabajando de manera normal, claro sin los elementos armados que lo custodiaba y el sindicato así lo aceptó”.
De acuerdo con versiones de trabajadores, el viernes 31 de agosto un comando armado irrumpió en la fiesta de cumpleaños de Sánchez Torres, que se realizó en casa del subsecretario de Planeación de la misma dependencia, Pablo Zapién Cortés, el grupo, de unas 15 personas, sometió a los asistentes a la fiesta, a las mujeres las obligó a meterse debajo de una mesa y a los varones los encerró en un baño, luego preguntaron por los dos funcionarios mencionados y por el secretario particular de Sánchez Torres, Elvis Cortés Salado, el subsecretario de Finanzas ya no se encontraba en el lugar, y a los otros dos les recogieron sus credenciales de elector luego de que revisaron una a una las de todos los varones.
En los días subsiguientes, a los funcionarios amenazados se les vio acompañados de escoltas armados, presuntamente miembros de la policía ministerial, y en los alrededores de las oficinas de la Secretaría de Salud frecuentemente se observaron elementos de la Marina, haciendo labores de resguardo, mismo que se retiró a partir de la protesta de los trabajadores el pasado viernes, pues consideraron que la presencia de hombres armados significaba un riesgo para la base trabajadora. (Abel Miranda Ayala)
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