Un rotundo fracaso el “mega-simulacro” con el que se recordaría el sismo del 85

Al menos en esta capital muchas alarmas no sonaron; en Palacio de Gobierno las salidas de emergencia no sirven 

El “mega-simulacro” programado para conmemorar el Día Nacional de la Protección Civil, con el cual se recordaría a las víctimas del sismo de 1985, fue un rotundo fracaso, pues la desorganización imperante hizo que ni siquiera sonara la alarma sísmica y los trabajadores de
las dependencias que salieron a la explanada del palacio de gobierno, al sur de la ciudad, y a la plancha de la Plaza Cívica Primer Congreso de Anáhuac, fue porque tenían conocimiento que a las 10 de la mañana tendría lugar ese evento. Sería a las 10 de la mañana de ayer que el “mega-simulacro” se llevaría a cabo, lo cual se difundió a través de las redes sociales, correos electrónicos y de los medios de comunicación, de tal forma que todos los trabajadores del palacio de gobierno sabían que se realizaría la evacuación del edificio, sin embargo a la hora señalada las alarmas del palacio de gobierno no sonaron y sólo se escuchaban algunas señales lejanas de otros edificios. Los trabajadores comenzaron a salir de sus áreas de trabajo porque sabían que debían hacerlo a las diez de la mañana y otros al ver que la gente se congregaba en el centro de la plaza cívica Vicente Guerrero. La salida de los empleados fue completamente desordenada, nadie coordinó la evacuación de los edificios a pesar de que el personal de Protección Civil estatal se había colocado en calles aledañas para que, siguiendo el protocolo del simulacro, se presentaran para atender a los supuestos lesionados, y aunque la “llamada” al número de emergencia 066 no se hizo, a las diez de la mañana el personal de Protección Civil y militares se presentaron en el lugar. Alrededor de media hora después todo el personal regresó a sus actividades habituales. Cabe señalar que en el edificio Centro se realizaba un evento de la Secretaría de la Mujer con una representante de la Organización de las Naciones Unidas, cuyas participantes se negaron a salir del inmueble a pesar de que elementos del Ejército Mexicano se los pidieron. La secretaria de la Mujer y demás asistentes a ese acto prefirieron seguir con su reunión ya que dijeron que estaban retrasadas. Por su parte los empleados del sótano del edificio Costa Chica, donde se alberga la dirección de Archivo de Personal, denunciaron que fue imposible abrir las puertas de emergencia porque se encuentran descompuestas, además de que desde hace dos años no se capacita a los Comités de Protección Civil que se han formado en esa dependencia que se encuentran en la zona de mayor riesgo del inmueble. Dante Uriza Rodríguez Bello indicó que en el sótano del edificio Costa Chica laboran alrededor de 130 personas, de entre las cuales se formó un Comité de Protección Civil que conforman de 17 personas, mismas que en el pasado recibían capacitación e incluso gestionaron recursos para señalar la ruta de evacuación, pero desde hace dos años que toda actividad con este grupo se ha suspendido y ello se reflejó en la desorganización que quedó evidente en este “mega-simulacro”. Indicó que la puerta de emergencia se encuentra descompuesta y es la parte más riesgosa pues aparte de que tuvieron que salir por las escaleras hacia la explanada central del palacio de gobierno, que es la ruta es más larga y más peligrosa porque chocan con todos los que bajan de los edificios, además de que la ruta de evacuación marcada no se puede utilizar, lo que confunde al personal. En el centro de la ciudad Mientras tanto, en el centro de la ciudad, la situación no fue diferente. A la desorganización de la dependencia organizadora del “mega-simulacro”, la Subsecretaría de Protección Civil del gobierno del estado, se sumó la apatía de funcionarios estatales, trabajadores e incluso de la propia ciudadanía. Es más, al personal de Proyección Civil que ya estaba presto a participar en este evento, en la explanada de la Plaza Cívica Primer Congreso de Anáhuac, simplemente les fue comunicado que el “mega-simulacro” se había suspendido. Y como a las 10 de la mañana no sonó la alarma sísmica, fueron pocas las dependencias, entre ellas el Registro Agrario Nacional, que desalojaron por cuenta propia a sus trabajadores, pero mucho tiempo después. Del Ayuntamiento de Chilpancingo, del Palacio de la Cultura Ignacio Manuel Altamirano y del Tribunal Superior de Justicia nadie salió. Entre las 10:15 y las 10:20, el personal de Protección Civil y el propio secretario de Seguridad Pública Municipal, Bonifacio Montúfar Mendoza, se retiraron del zócalo capitalino. (Abel Miranda Ayala y Baltazar Jiménez)

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