Demandan la pronta remodelación de Jardín de Niños “Antonia Nava”

Padres de familia, cuyos hijos estudian en el Jardín de Niños “Antonia Nava de Catalán” se quejaron de las condiciones en las que sus hijos reciben educación preescolar ya que debido a la remodelación del edificio que ocupa la escuela, se trasladaron a las instalaciones de la Feria de San Mateo, Navidad
y Año Nuevo para tomar clases.
Y es que según algunos de ellos que pidieron el anonimato, aseguraron que la constructora que se encarga de los trabajos de reconstrucción les pidió que el escombro que se encuentra acumulado sobre la calle Rubén Mora en el Barrio de San Antonio fuera removido para continuar con los trabajos, cosa que no ha sucedido por atravesarse el periodo vacacional, entre otros detalles.
Para solucionar el problema este viernes por la mañana padres de familia y maestros sostuvieron una reunión en donde se pidió una cooperación de 200 pesos por padre de familia para rentar un camión y personal que se lleve el escombro, “pero muchos de nosotros no tenemos dinero para dar esa cooperación”.
Una de las propuestas de una madre de familia es que comiencen a dar la cooperación como puedan hasta completar los 200 pesos que exigen para que los trabajos de reconstrucción continúen.
Y es que explicaron que las condiciones donde reciben clases no son las ideales en principio porque las áreas que habilitaron como salones no tienen divisiones, aunado a las condiciones de inseguridad que privan en el lugar por lo que muchos padres tienen que quedarse a vigilar a sus hijos hasta la hora de salida, “el encargado de la feria, también quiere que los niños paguen los 3 pesos del baño, imagínese, son muchos y es un negocio redondo y no se vale”.
Otra de las quejas es que los baños se encuentran en condiciones insalubres y los encargados no hacen nada para asearlos y aún así quieren cobrar una tarifa, aunado a la forma grosera y prepotente de la persona encargada que dicen se negó a proporcionarles su identidad, “le pedimos nos proporcionara áreas más seguras para nuestros hijos, y nos mandó al diablo, de una forma muy grosera”.
Ante esta situación pidieron a las autoridades municipales, su intervención para que ayuden a solucionar parte del problema, aunque expresaron que los directivos del plantel poco hacen para buscar otro lugar con mejores condiciones para que sus hijos puedan recibir educación, y máxime cuando “las maestras paran labores para exigir otras cosas, y no para exigir mejores condiciones para sus alumnos”, como ocurrió el año escolar pasado que pararon labores casi un mes para pedir la remoción de una supervisora escolar. (NOTYMAS)