Las protestas de los trabajadores por intereses políticos, responde el rector

El rector de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAG), Asencio Villegas Arrizón, denunció que las protestas de los trabajadores administrativos obedecen a intereses políticos.
Afirmó que “es ilegal” la protesta que mantienen, desde hace tres días, los agremiados al Sindicato de
Trabajadores Técnicos, Administrativos y de Intendencia al Servicio (STTAISUAG) en Rectoría.
Explicó que se aproxima la elección para renovar al Comité Ejecutivo de esa agrupación gremial y cada dirigente “quiere llevar agua para su molino” presionando a la administración central para conseguir respaldos.
“Son varios grupos que dirigen esa organización sindical y se pelean entre ellos para ver quién va a dirigirlos”, dijo en entrevista este jueves el rector de la máxima casa de estudios en Guerrero.
Señaló que el secretario general del sindicato tiene muchas ventajas políticas y económicas porque elevan sus ingresos y pueden heredar a un familiar la plaza que laboraron, “a eso obedecen las presiones que están realizando”.
Desde el martes un grupo de agremiados al STTAISUAG encabezados por su secretario general, Valerio Adame Rendón, tomaron las instalaciones de Rectoría y otros centros de trabajo como medida de presión para exigir cumplimiento a sus demandas.
También exigen la destitución del director de Recursos Humanos, Nicolás Pineda, debido a una presunta serie de actos prepotentes.
Villegas Arrizón, dijo que el movimiento de los trabajadores sindicales es para demostrar “quién gruñe más” y poder obtener una mayor votación al momento de elegir al nuevo dirigente del STTAISUAG.
Insistió que el movimiento “es político” porque el Contrato Colectivo de Trabajo contempla “un sinnúmero de clausulas muy ventajosas para algunos trabajadores, pero desventajosas para la Universidad y por eso no podemos ceder a muchas de las peticiones que nos hacen los sindicatos”.
Añadió que la mayoría de las demandas laborales planteadas por esa expresión gremial ya fueron atendidas dentro del techo presupuestal establecido. Concedió que existen otras demandas laborales que no pueden ser resueltas porque dependen de un financiamiento federal que no ha sido etiquetado para la UAG.
Consideró que los trabajadores están generando un daño al patrimonio universitario porque se encuentra en proceso una auditoría de la Auditoría Superior de la Federación (ASF) y la evaluación del Sistema de Gestión de Calidad.
No descartó iniciar procesos administrativos y hasta jurídicos contra los trabajadores inconformes por los daños que han ocasionando con sus protestas. (www.agenciairza.com)

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