FORO POLITICO.

Por Salomón García Gálvez.

PRI: RENOVARSE, O MORIR.

Por su autoritarismo, por su exclusión, por prácticas de imposición y una política caciquil, el PRI paga muy caros sus errores en Guerrero: Perdió la mayoría de las 81 presidencias municipales, la mayoría de las 28 diputaciones locales, todas las -9- diputaciones federales y la fórmula uno para el Senado de
la República.
La lección es muy dura para el PRI. Lo único que le consuela a la militancia del tricolor en Guerrero, es haber ganado la Presidencia de la República con su carismático candidato, Enrique Peña Nieto, un político que, ya está visto, está hecho para enfrentar los peores escenarios.
Pese a la incesante guerra sucia, ni una pluma le han quitado a ese gallo, quien muestra una fortaleza a toda prueba, y el IFE confirma que será el próximo Presidente de la República, aunque Andrés Manuel López Obrador se pare de cabeza frente a Palacio Nacional de la capital del país. ¡Ese arroz, ya se coció! -a favor de Peña Nieto-.
El PRI necesita refundarse no sólo en Guerrero también a nivel nacional. Llegó la hora de que los caciques se vayan. Ya le hicieron mucho daño al partido que les ha dado todo: Mucho poder, dinero, posición, inmunidad e impunidad. Si los caciques se empeñan en seguir mangoneando al PRI en Guerrero, más lo van a hundir, y en el futuro no van a ganar ni una comisaría.
No todo está perdido para el PRI. Aún puede rescatar lo bueno. El PRI puede refundarse hasta sus cimientos -piedra por piedra-, y construir a un nuevo tricolor sin la presencia de rancios cacicazgos, que la gente repudia.
Si el PRI continúa como rehén de los caciques, la pregunta que muchos se hacen es esta: ¿Quién será el próximo candidato priista a gobernador de Guerrero que luche cuerpo a cuerpo contra el futuro aspirante del PRD?... ¡Nombres!
IEEG, MEJOR QUE EL IFE EN GRO.
La labor que ha venido haciendo el Instituto Estatal Electoral del Estado de Guerrero (IEEG), ha sido más que destacada: puntual, muy técnica y con profesionalismo, por parte de la mayoría de los consejeros encabezados por su presidente César Gustavo Ramos Castro.
El IEEG, con antelación se capacitó y se preparó para enfrentar el proceso electoral local para los comicios de presidentes municipales y diputados locales, y ha sabido cumplir -en tiempo y forma- hasta el día de la jornada electoral, del pasado día primero de julio cuando se instalaron la totalidad de las casillas, con sus representantes, en un cien por ciento.
En términos globales la jornada comicial organizada por el IEEG, fue blanca, en paz y de respeto entre los contendientes. Las anomalías que se registraron en ciertas casillas, fueron externas, fueron obra de gente foránea, de los malosos, pero el personal capacitado hizo su trabajo en términos generales satisfactorio para la ciudadanía guerrerense. Esto es lo que más cuenta.
Los consejeros electorales supervisaron bien al personal comisionado en todas las juntas distritales de las siete regiones. Con la experiencia de haber llevado a cabo con éxito la reciente jornada comicial para elegir gobernador del estado, el IEEG salió avante de su última jornada comicial.
El trabajo eficiente, puntual y muy técnico mostrado y con buenos resultados, habla de la eficacia y capacidad de la mayoría de los consejeros electorales como Arturo Pacheco Bedolla –Presidente de la Comisión de Quejas y Denuncias- así como del Presidente del órgano ciudadano encabezado por César Ramos Castro.
Los dos jóvenes consejeros –Ramos Castro y Pacheco Bedolla-, con hechos, han mostrado saber hacer bien el trabajo electoral al frente del IEEG, con positivos resultados. Su eficiente trabajo los recomienda para otras empresas y mejores horizontes de acuerdo con su perfil profesional.
SIN CONFIANZA HACIA LÓPEZ OBRADOR.
Más allá de las cifras finales del IFE, que ya le ratifican la derrota al ex candidato presidencial Andrés Manuel López Obrador, ante su adversario Enrique Peña Nieto, al perredista casi ninguno de los dueños del capital ($$$) en México le tiene confianza. Ni el Presidente de los Estados Unidos Barack Obama le tiene confianza al Peje.
Si llegase a ser Presidente López Obrador, nacería en México un nuevo dictador, un émulo del venezolano, Hugo Chávez; iba a nacionalizar las empresas transnacionales y los capitales huirían del país. Habría miles de despedidos de las fábricas, de las empresas, la planta productiva se iría a pique. El peso se devaluaría más ante el dólar por la incontenible inflación. La nación mexicana, viviría un caos y crisis financiera, nada deseable por nadie.
López Obrador jamás pudo construir una buena relación con el sector empresarial. Se peleó con las empresas televisoras, no respetó a las instituciones, ni las respetará. Sin embargo, ya se prepara para volver a ser candidato presidencial para el año 2018. A ver si le alcanza la cuerda.
Andrés Manuel, puede sentirse orgulloso de haber construido un liderazgo político en México con sus quince millones de votos, pero más de tres millones de mexicanos le dijeron en las urnas: ¡NO!... No puedes ser Presidente del país, y menos enfrentar a mexicanos contra mexicanos, simplemente porque se siente el nuevo Mesías.
Ayer el IFE llevaba más de un 98 por ciento del recuento de votos y actas distritales donde el candidato presidencial del PRI, Enrique Peña Nieto, tenía a su favor más de un 38% y López Obrador poco más del 31%. La posición del IFE, era esta: Desconocer resultado, fuera del marco legal… Punto.
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