Nomás de broma le quitó el freno a la troca, pero tumbó una casa en la FPR

La aparente broma de un “amigo”, que sin medir consecuencias quitó el freno de mano a una camioneta cargada con garrafones de agua, estuvo a punto de terminar en desgracia, pues la unidad motriz se precipitó contra una humilde vivienda construida de madera y lámina de cartón en la colonia
Frente Popular Revolucionario, misma que quedó destrozada y aunque sus propietarios no sufrieron daños el hecho generó momentos de pánico.
El hecho ocurrió a las dos y media de la tarde de ayer, cuando el chofer de la camioneta Nissan tipo confeccionada para transportar garrafones con agua de la empresa purificadora “Cristal”, con placas de circulación HB-86142 de Guerrero, Edgar Alonso Reyes, de 17 años de edad, había dejado estacionado el vehículo en la calle Cuatro de la citada colonia para ingerir sus alimentos.
En ese lugar, un vecino suyo, quien al parecer estaba ebrio, y quien en el pasado ha tenido problemas con Edgar Alonso Reyes, al ver la camioneta que estaba estacionada decidió quitarle los frenos, por lo que la unidad motriz se desplazó en reversa por la empinada calle.
Por la simple inercia el vehículo tomó gran velocidad y se fue a estrellar contra la humilde vivienda, sin que nadie pudiera hacer algo por detenerla.
La vivienda afectada pertenece a la señora Silvia Morales Hernández, de 50 años, quien habita ese lugar con vive su hija Nancy Guadalupe Hernández Morales, de 27 años, y otros tres integrantes de la familia.
Una señora de 76 años que fue identificada como Cristina Vásquez Socoyote al ver el accidente cayó en una crisis de histeria, por lo que fue auxiliada por paramédicos de Protección Civil del estado y la trasladaron al hospital general “Raymundo Abarca Alarcón”.
Debido a la magnitud del accidente que provocó un individuo que se refugió en su casa, los vecinos de la colonia Frente Popular Revolucionario (FPR) salieron de sus hogares para saber qué era lo que había sucedido.
Luego, oficiales de Tránsito Municipal y Policías locales llegaron al sitio del accidente, donde con otra camioneta Nissan tipo estaquitas sacaron la unidad que cayó en la vivienda y luego fue remolcada al corralón.
Decenas de botellones con agua quedaron esparcidos entre las calles Tres y Cuatro de la referida colonia, los cuales fueron acarreados por los demás trabajadores de la mencionada empresa purificadora.
Hasta la tarde de ayer se desconocía si la empresa procederá legalmente contra el ebrio que quitó el freno a la camioneta o si dejará que el seguro se haga responsable de todos los daños ocasionados. (Miguel Campuzano)