Cuauhtémoc Salgado Romero, nuevo dirigente estatal del PRI

*Llama a no perder la oportunidad de que el PRI triunfe en julio

*Claudia, la hija de René Lobato, es secretaria general adjunta

*Se incorporan Daniel Pano y María del Pilar Vadillo al CDE

Con el aval de más de 600 consejeros políticos estatales del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y de sus candidatos a senadores y diputados federales y locales —los que ya están definidos— ayer, el legislador federal Cuauhtémoc Salgado Romero rindió protesta como delegado con funciones de
Presidente del Comité Directivo Estatal de este instituto político, encargo en el que será acompañado por María del Pilar Vadillo Ruiz, en la Secretaría General
Después de muchos meses de rumores en este sentido, en los cuales estuvo al frente de la dirigencia estatal del tricolor el chihuahuense Víctor Valencia de los Santos, finalmente ayer, en la Cuarta Sesión Extraordinaria del Consejo Político Estatal del PRI, se concretó el arribo del político calentano identificado con el grupo del ex gobernador Rubén Figueroa Alcocer.
El evento se desarrolló en el Auditorio del Comité Directivo Estatal del PRI en donde estuvieron presentes 612 delegados del Consejo Político Estatal quienes eligieron por unanimidad los nombramientos de la nueva dirigencia estatal: Cuauhtémoc Salgado Romero, como presidente del CDE y María del Pilar Vadillo Ruiz en la Secretaría General.
El Auditorio fue abarrotado por militantes priistas de todas las regiones del estado, en el que destacó la presencia los candidatos del PRI encabezados por René Juárez Cisneros; de los ex gobernadores, Rubén Figueroa Alcocer e Israel Nogueda Otero, y del coordinador de la campaña del candidato a la Presidencia de la República, Héctor Astudillo Flores.
Al hacer uso de la palabra, primeramente Salgado Romero llamó al priísmo guerrerense a no perder la oportunidad de que el PRI “triunfe en el mayor número de municipios, de tener un Congreso local con mayoría priista que sea un verdadero contrapeso para el Ejecutivo del estado y no se puede perder la oportunidad de tener un Congreso federal con una mayoría de diputados y senadores “que sean garantes de la aprobación de las mejores leyes que el país requiere”.
Y agregó: “sobre todo no perdamos la oportunidad de recuperar el gobierno federal, con un hombre noble, bueno, sencillo y capaz como lo es Enrique Peña Nieto.”
Sobre las vicisitudes que ha tenido que enfrentar en los últimos meses su partido, sobre todo por la inconformidad de quienes no lograron ser candidatos a cargos de elección popular, Cuauhtémoc Salgado saber que “el transitar del proceso de selección interna de nuestro partido, han quedado compañeros militantes inconformes con los resultados”, por lo que les pidió paciencia para el diálogo y encontrar el camino que les permita llegar a la conciliación.
El nuevo dirigente estatal del PRI aprovechó el momento también para dar a conocer quienes lo acompañarán en el Comité Directivo Estatal: Daniel Pano Cruz en la Secretaría de Organización, en sustitución de Heriberto Huicochea; Alfonso Manjarrez Gómez, como secretario de Finanzas y Administración, y como secretaria general adjunta, Claudia Lobato Méndez, hija del ex diputado local por el Partido de la Revolución Democrática (PRD), René Lobato Ramírez.
A consejeros políticos estatales y militantes del PRI reunidos en ese auditorio, Salgado Romero dijo: “quiero escucharlos, quiero oír sus consejos, pero sobre todo quiero la oportunidad de tener esta encomienda, ya que lo que nos espera no será nada fácil, es poco el tiempo y muchos los obstáculos a vencer, por eso le dedicaremos todo nuestro esfuerzo a la organización de nuestras estructuras y a tener a los mejores representantes en las casillas, a reclutar a las y los mejores militantes para que promuevan a nuestros candidatos y sus propuestas.”
En su oportunidad el candidato a senador, René Juárez Cisneros, a nombre de los candidatos y precandidatos del PRI, respaldó la designación de Cuauhtémoc Salgado Romero como dirigente estatal del tricolor, sobre todo por las condiciones en que asume el cargo, ya que si “conducir a un partido político en condiciones normales no es tarea fácil, dirigir a un partido político inmerso en un proceso electoral, es aún más complicado”. (Redacción)