Dan marcha atrás al aumento al pasaje… pero sólo para discapacitados y ancianos
Luego de la marcha que realizaron por las principales calles de la ciudad, discapacitados y ancianos aglutinados en la organización Digna Ochoa y Plácido, que encabeza Juan Valenzo Villanueva, lograron que el gobierno del estado diera marcha atrás en el incremento al precio del
pasaje, para este sector de la población, es decir, seguirán pagando 4 pesos. Los manifestantes recorrieron la avenida Presidente Juárez desde la Alameda Granados Maldonado hasta el zócalo capitalino, hasta donde se trasladó el subsecretario de Asuntos Políticos y Gobernación, Víctor Aguirre Alcaine, quien les informó que por disposición de la Comisión Técnica de Transportes del Estado los discapacitados y personas de la tercera edad no sufrirían el incremento al precio del pasaje. De acuerdo al funcionario estatal, lo mismo ocurriría con los estudiantes, quienes podrían pagar 4 pesos si muestran su credencial, aunque esta medida se definirá después de un estudio de factibilidad cuyo resultado tardará algunos días en darse a conocer. Aguirre Alcaine reconoció que no se está llegando al 50 por ciento de descuento que demandan las personas con discapacidad y los adultos mayores, sin embargo el hecho de que se tengan una tarifa preferencial que nunca se ha tenido en Chilpancingo, ya es un gran avance y se seguirá trabajando para mejorarles sus condiciones de vida a estas personas, pues desde el gobierno del estado también se les han ofrecido proyectos productivos, becas, cursos de capacitación, y cuanto necesiten para insertarse en la vida productiva. En la amena reunión que tuvo el funcionario con los discapacitados, se reconoció que el Ayuntamiento de Chilpancingo también ha tenido interés en atender a este sector poblacional pues oferta programas de descuentos, a través de los cuales sólo pagan la mitad en su impuesto predial y les descuentan el 20 por ciento en el pago de agua potable. “Jamás los gobiernos de Ángel Aguirre y el de Héctor Astudillo serán indolentes con las necesidades de los discapacitados o los adultos mayores, son personas que merecen todo nuestro respeto, nuestro apoyo y trabajamos para ello”, señaló Aguirre Alcaine, para concluir con la reunión que para los marchistas fue productiva y les genera un alivio en su economía, puesto que el incremento de un 25 por ciento al precio del pasaje resultaba muy lesivo a sus demeritados ingresos. Antes de la reunión, el dirigente de la Organización de Discapacitados Digna Ochoa y Plácido, Juan Valenzo Villanueva, había calificado como criminal e injusto el aumento de un 25 por ciento al costo del pasaje en esta capital, sobre todo si se considera que el aumento al salario mínimo para este año apenas fue del 5 por ciento. Mencionó además que el aumento al pasaje afecta sobre todo a los más pobres, pues por vivir en las colonias de la periferia de la ciudad, para poder trasladarse hasta sus fuentes de trabajo tienen que tomar hasta dos o tres urvans, aparte lo que tienen que gastar para mandar a la escuela a sus hijos. Aparte, destacó, los discapacitados sufren de discriminación por parte de los choferes de las unidades del transporte público, ya que cuando ven a uno de ellos no los levantan porque pierden mucho tiempo. (Abel Miranda Ayala y Baltazar Jiménez R.)
pasaje, para este sector de la población, es decir, seguirán pagando 4 pesos. Los manifestantes recorrieron la avenida Presidente Juárez desde la Alameda Granados Maldonado hasta el zócalo capitalino, hasta donde se trasladó el subsecretario de Asuntos Políticos y Gobernación, Víctor Aguirre Alcaine, quien les informó que por disposición de la Comisión Técnica de Transportes del Estado los discapacitados y personas de la tercera edad no sufrirían el incremento al precio del pasaje. De acuerdo al funcionario estatal, lo mismo ocurriría con los estudiantes, quienes podrían pagar 4 pesos si muestran su credencial, aunque esta medida se definirá después de un estudio de factibilidad cuyo resultado tardará algunos días en darse a conocer. Aguirre Alcaine reconoció que no se está llegando al 50 por ciento de descuento que demandan las personas con discapacidad y los adultos mayores, sin embargo el hecho de que se tengan una tarifa preferencial que nunca se ha tenido en Chilpancingo, ya es un gran avance y se seguirá trabajando para mejorarles sus condiciones de vida a estas personas, pues desde el gobierno del estado también se les han ofrecido proyectos productivos, becas, cursos de capacitación, y cuanto necesiten para insertarse en la vida productiva. En la amena reunión que tuvo el funcionario con los discapacitados, se reconoció que el Ayuntamiento de Chilpancingo también ha tenido interés en atender a este sector poblacional pues oferta programas de descuentos, a través de los cuales sólo pagan la mitad en su impuesto predial y les descuentan el 20 por ciento en el pago de agua potable. “Jamás los gobiernos de Ángel Aguirre y el de Héctor Astudillo serán indolentes con las necesidades de los discapacitados o los adultos mayores, son personas que merecen todo nuestro respeto, nuestro apoyo y trabajamos para ello”, señaló Aguirre Alcaine, para concluir con la reunión que para los marchistas fue productiva y les genera un alivio en su economía, puesto que el incremento de un 25 por ciento al precio del pasaje resultaba muy lesivo a sus demeritados ingresos. Antes de la reunión, el dirigente de la Organización de Discapacitados Digna Ochoa y Plácido, Juan Valenzo Villanueva, había calificado como criminal e injusto el aumento de un 25 por ciento al costo del pasaje en esta capital, sobre todo si se considera que el aumento al salario mínimo para este año apenas fue del 5 por ciento. Mencionó además que el aumento al pasaje afecta sobre todo a los más pobres, pues por vivir en las colonias de la periferia de la ciudad, para poder trasladarse hasta sus fuentes de trabajo tienen que tomar hasta dos o tres urvans, aparte lo que tienen que gastar para mandar a la escuela a sus hijos. Aparte, destacó, los discapacitados sufren de discriminación por parte de los choferes de las unidades del transporte público, ya que cuando ven a uno de ellos no los levantan porque pierden mucho tiempo. (Abel Miranda Ayala y Baltazar Jiménez R.)
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