“Carnal” de influyentes perredistas se salvó de ir a la grande por robo

Gilberto de la Rosa Peláez, de 18 años de edad, quien dijo ser hermano de dos conocidos personajes de la “farándula” política local y estatal, fue capturado la mañana de ayer por elementos de la Policía Preventiva Municipal después de que junto con otro individuo asaltó y
lesionó a golpes a un empleado. La detención de De la Rosa Peláez ocurrió a las 6:05 horas, cuando se daba a la fuga a bordo de un vehículo Chevrolet, tipo Chevy, rojo, sobre la avenida Juan Ruiz de Alarcón y calle Colón, en el primer cuadro de la ciudad. Conforme a la versión del agraviado, Andrés Francisco Pat Álvarez, de 23 años de edad, quien vive en la calle Prolongación Valerio Trujano, colonia Nicolás Bravo, los hechos ocurrieron de la siguiente manera: La mañana de ayer caminaba sobre la avenida Juan Ruiz de Alarcón, a la altura del negocio denominado “Cervesol”, del barrio de San Francisco, cuando fue interceptado por dos individuos que de inmediato lo empezaron a agredir a puñetazos en el rostro y patadas en diversas partes del cuerpo. Después de la brutal golpiza, los dos individuos lo despojaron de 600 pesos en efectivo que llevaba en su cartera y luego se dieron a la fuga a bordo del vehículo Chevy rojo. Acto seguido, el agraviado notificó el robo y la golpiza que sufrió al número de emergencia 066, por lo que elementos de la Policía Preventiva Municipal se abocaron a la búsqueda de los presuntos malandrines y con las características del auto en que huyeron, la media filiación y forma en cómo vestían, le dieron alcance al vehículo cuando circulaba sobre la avenida Juan Ruiz de Alarcón, esquina con Cristóbal Colón, por lo que procedieron a detenerlo. Sin embargo, sólo fue detenido Gilberto de la Rosa Peláez, mientras que su cómplice se dio a la fuga. El detenido fue puesto a disposición del juez calificador de Barandilla, donde por la mañana se presentaron familiares de Gilberto de la Rosa para llegar a un arreglo monetario con el asaltado, quien por tal motivo ya no interpuso denuncia penal alguna. Por ello, el detenido fue liberado horas después, tras haber pagado la multa administrativa correspondiente y haber llegado a un arreglo con la víctima. (Miguel Campuzano).

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