Ilegales y con claros tintes políticos los paros de los sindicatos universitarios

El rector de la Universidad Autónoma de Guerrero, Ascencio Villegas Arrizón, expresó que los paros laborales impulsados por los sindicatos universitarios —el de Trabajadores Académicos (STAUAG) y el de Administrativos y de Intendencia (STTAISUAG)— son completamente “ilegales” y, además,
tienen claros tintes políticos.
Es más, señaló que por la naturaleza de estas movilizaciones, la administración central de la UAG podría comenzar a aplicar los descuentos respectivos a los parista y a iniciar procedimientos legales contra los líderes sindicales, pero dejó en claro que no lo hará.
Indicó que los paros como el que el pasado martes impulsó el STTAISUAG, “son ilegales”, porque cuando se estalla una huelga se tiene que realizar primero el emplazamiento ante la Junta Local de Conciliación y Arbitraje (JLCyA) y en este caso no se hicieron, simplemente son medidas de presión política que se hacen a la administración central para buscar beneficios personales por parte de los líderes a quienes acusó también de rechazar propuestas que van dirigidas a beneficiar especialmente a los trabajadores que tienen menores ingresos. “Eso sí no lo aceptan”, acotó.
Dijo que con sus paros de labores lo único que hacen es “dañar a la Universidad”, sin embargo dijo que espera poder reunirse con las dirigencias sindicales para poder lograr acuerdos y tener un buen entendimiento, “porque estamos trabajando con muy buen ánimo”.
Indicó que por estos paros ilegales la universidad puede dejar de pagarles esos días a los trabajadores que no realizaron las actividades para las que se encuentran contratados, o en todo caso poner una demanda contra los dirigentes sindicales, sin embargo creo que través de la conciliación podamos ponernos de acuerdo con el sindicato”.
Añadió que estos paros laborales son cada año y es típico de la Universidad que los sindicatos amaguen, además de que en este año se agrega otro elemento, que es que en breve habrá renovación del Comité Ejecutivo sindical y entonces todas las corrientes quieren ponerse valientes con el subsidio de la Universidad para encabezar la próxima dirigencia, “entonces esta situación también es política”.
En cuanto a las demandas que ha venido planteando el STTAISUAG, que el pasado martes realizó un paro de 12 horas, el rector dijo que muchas de las peticiones son incumplibles a pesar de que se encuentran establecidas en el contrato colectivo de trabajo.
“Hay algunas cláusulas del contrato colectivo que son muy leoninas para la Universidad que no tiene techo financiero para ellas, y estas son herencia que nos han dejado rectores y comités ejecutivos anteriores”.
Por ejemplo dijo que gracias a esas cláusulas no hay un límite de recategorizaciones de los trabajadores, y de esta manera muchos administrativos y de intendencia lograron tener tiempo completo y cobran como si fueran académicos, además no trabajan las ocho horas, “entonces necesitamos cambiar esta cláusula que permita ya detener la masacre al subsidio universitario”.
Añadió que hay otra cláusula que permite que haya más de 240 categorías vigentes mismas que no reconoce la Secretaría de Hacienda, por ello se les hizo una propuesta de cómo compactar y como beneficiar a los trabajadores más pobres de la Universidad, a los que difícilmente van a poder mejorar su salario, y sin embargo han rechazado siquiera discutir esta propuesta con las bases de trabajadores. (Abel Miranda Ayala)