El propietario del aserradero La Colmena murió aplastado por dos pesados troncos

Miguel Campuzano Cabañas


Una horrible muerte encontró el propietario del aserradero “La Colmena”, entre otros, Silvino Mejía Graciano, de 48 años de edad, al ser aplastado por dos troncos con un peso de 300 kilogramos cada uno, en su negocio ubicado en la carretera federal Chilpancingo-Chichihualco, unos 500 metros
adelante del punto conocido como “La Quebradora”.
El hecho de sangre que consternó a los empleados del aserradero ocurrió a las 11:30 horas del sábado, por el cual la Policía Preventiva Municipal presentó ante el Ministerio Público a Jaime Martínez Rodríguez, de 49 años de edad, vecino de la calle Circuito Sindicalista número 2, de la colonia Bellavista, conductor del tráiler marca Volvo, del cual descargaban los troncos de pino.
De acuerdo con los hechos, Silvino Mejía Graciano y unos 10 de sus trabajadores descargaban los pesados troncos que habían sido traídos de la sierra de Tixtlancingo, municipio de Coyuca de Benítez, del tráiler blanco, marca Volvo, con permiso provisional, pero cuando realizaban la maniobra algo salió mal.
El caso es que don Silvino Mejía se encontraba en la parte trasera del tráiler y no tuvo tiempo de quitarse al írsele encima dos troncos con un peso superior a los 300 kilogramos cada uno de ellos, sin que los demás trabajadores del aserradero “La Colmena” pudieran hacer algo por evitarlo.
Los hechos fueron en verdad dramática ya que uno de los troncos le aplastó totalmente la cabeza, por lo que la masa encefálica salió expulsada.
Luego, los trabajadores del aserradero dieron aviso a las autoridades policíacas y a la familia del finado.
Al lugar de los hechos acudió el agente auxiliar del Ministerio Público, peritos de la Procuraduría General de Justicia del estado (PGJE) y personal del Servicio Médico Forense (SEMEFO) de Chilpancingo para realizar las primeras indagatorias de ley.

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