DIF-Guerrero apoyó para que un infante reciba atención en un hospital de Texas

Para brindar atención médica oportuna y especializada al niño Gabriel Pineda Zamudio de 5 años de edad, quien sufrió quemaduras de segundo y tercer grado, el DIF Guerrero que preside Laura del Rocío Herrera de Aguirre, aportó la cantidad de 157 mil pesos para su traslado y hospitalización al
Hospital Shriners en Galveston Texas, a través de la Fundación Michou y Mau.
Laura del Rocío comentó que el gobierno que encabeza Ángel Aguirre Rivero está siempre atento para que todas las niñas y niños cuenten con las condiciones de bienestar para vivir bien y sobre todo los que por diversas circunstancias se encuentran en situaciones de riesgo, como el caso del niño Gabriel, que por falta de recursos económicos podía perder la vida.
Herrera de Aguirre dijo que la atención que se brinda hoy al menor es resultado de la coordinación que en meses pasados el DIF Guerrero acordó con de Virginia Sendel de Lemaitre, presidenta de la Fundación Michou y Mau para responder oportunamente ante este tipo de casos que ponen en peligro la integridad física de quienes sufren quemaduras.
En entrevista vía telefónica, la señora María Anais Zamudio López, mamá del menor Gabriel Pineda Zamudio, agradeció al gobierno del Ángel Aguirre Rivero y Laura del Rocío Herrera la pronta respuesta del DIF Guerrero para que su hijo fuera trasladado al hospital especializado en Galveston, Texas, y que gracias a ello tiene más posibilidades de recuperarse y continuar una vida normal como cualquier niño.
Asimismo informó que el estado de salud de su hijo es crítico y se encuentra en terapia intensiva; de acuerdo al diagnóstico médico presenta el 41 por ciento de quemaduras de primer y segundo grado quien requerirá de varias intervenciones quirúrgicas, implantes, tratamientos, cultivo de piel.
Agregó que el tratamiento que se brinda al menor Gabriel para mejorar su estado de salud durará de 5 a 6 meses, dependiendo de la evolución que tenga el niño, posteriormente requerirá revisión cada 3, 6, 9 y 12 meses, hasta cumplir los 21 años, debido a que los implantes y cirugías se hacen de acuerdo al crecimiento físico.
Por último, Zamudio López recomendó a los padres de familia a extremar precauciones con sus hijos pequeños, principalmente a evitar actividades que representen un riesgo para su integridad, ya que este tipo de accidentes mortales se generan principalmente por descuido de los tutores y cambian por completo la vida de la familia.