Choferes de taxis piden ser beneficiados con un permiso

En demanda de que se entreguen concesiones de transporte público ligero (taxis), previa depuración pública y universal de los verdaderos trabajadores del volante y sin la injerencia de los líderes de organizaciones, ayer se manifestaron frente a la residencia oficial Casa Guerrero, un centenar de
choferes quienes aseguran tener, todos ellos, más de 20 años de servicio y por ende derecho al beneficio.
Los quejosos indicaron que en la movilización se concentraron choferes de todas las organizaciones, que tiene más de 20 años de servicio comprobables, mismo que no han logrado tener una concesión, simplemente porque la injerencia de los líderes de las grandes organizaciones han interferido para que no se logre concretar la depuración de los transportistas pues tratan de lograr beneficiar a miembros de sus organizaciones que tiene menor tiempo trabajando en el servicio público de transporte.
Los transportistas pidieron que la depuración se haga de manera libre y en conjunto para todos los que consideren tener derecho al beneficio, de tal manera que se cubra la necesidad de transporte que requiere la capital, pues un estudio socioeconómico realizado hace seis años indica que se requieren 76 nuevas concesiones, sin embargo este número podría ser mayor cuando se actualice el estudio socioeconómico, “puesto que en seis años indudablemente las condiciones han cambiado”, dicen.
Los manifestantes fueron conminados a que se trasladaran al palacio de gobierno donde una comisión sería atendida por el Director de Transportes Juan Larequi Radilla, y el Subsecretario de Asuntos Políticos, Víctor Aguirre Alcaine, a quienes entregaron el pliego de demandas que básicamente pide una depuración pública y la entrega de concesiones.
Finalmente anunciaron que en caso de no recibir respuesta positiva, en los próximos días iniciarían movilizaciones más intensas y se sumaría muchos otros transportistas que se encuentra en las mismas condiciones, pero se han negado a manifestarse por temor a ser expulsados de las organizaciones que son las que les respaldan sus años de servicio. (Abel Miranda Ayala)