Político el movimiento de rechazados de Medicina, afirma el rector Villegas
Tras pronunciarse en contra de la reducción presupuestal que pretende aplicar la Federación al estado, el rector de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAG), Ascencio Villegas Arrizón afirmó que la huelga de hambre que mantiene un grupo de rechazados de la Unidad Académica de Medicina es “político”, porque
detrás de los huelguistas están el líder de la corriente política universitaria MASAS y el dirigente del Sindicato de Trabajadores Académicos (STAUAG), Anselmo Sotelo Albarrán.
Cuestionado primeramente acerca de la reducción presupuestal de cuatro mil millones de pesos al estado, el rector indicó que todos deben de presionar para evitar la disminución, incluso señaló que él por su parte ya realiza los cabildeos necesarios ante la Comisión de Educación del Congreso de la Unión para que, principalmente, no afecten el presupuesto destinado a la UAG.
Y es que dijo que si a la UAG se le reduce el presupuesto no podrá llevar a cabo las obras de infraestructura y de equipamiento que están programados, además de que no podrá ampliar la cobertura: “si la federación nos recorta los recursos para educación no sé cómo le vamos a hacer pues si se realmente se aplica vamos a tener más jóvenes en la calle sin empleo.
Por este motivo, destacó, los rectores de todas las Universidades del país se unieron para exigirle a los diputados federales que modifiquen el presupuesto enviado por el gobierno de la República para que se atiendan las necesidades sociales.
En cuanto a los “rechazados” que se encuentran en huelga de hambre frente a las oficinas de Rectoría, Villegas Arrizón reiteró que no es posible abrirles espacio en la Unidad Académica de Medicina, porque no puede poner en riesgo la acreditación de su programa educativo.
Es más, dijo que este movimiento tiene más tintes políticos que de otra naturaleza pues los jóvenes “rechazados” que están en huelga de hambre rechazaron una beca del cien por ciento para estudiar en el Instituto Hipócrates.
“Este movimiento es político; estos muchachos están movidos políticamente por un grupo de maestros para exigir recategorizaciones. Detrás de ellos está la corriente denominada MASAS, que dirige un catedrático de Ciencias Sociales, y también el dirigente del STAUAG, Anselmo Sotelo”, expresó.
Cabe hacer notar que para analizar la solicitud de ingreso de los “rechazados”, el pasado 13 de octubre sesionó el Consejo Académico de la Unidad de Medicina, el cual finalmente determinó que “si se acepta la presión política como recurso para el ingreso, estamos condenados a aceptar ese medio para el ingreso y, seguramente, el año próximo se iría a la huelga otro grupo, al fin y al cabo se puede ingresar por este medio”.
En un oficio dirigido a los representantes de los huelguistas de hambre, los consejeros académicos de la Unidad de Medicina de la UAG les reiteran que no es la presión política el medio para el ingreso a esa escuela sino que son los criterios que deben prevalecer. (Baltazar Jiménez Rosales)
detrás de los huelguistas están el líder de la corriente política universitaria MASAS y el dirigente del Sindicato de Trabajadores Académicos (STAUAG), Anselmo Sotelo Albarrán.
Cuestionado primeramente acerca de la reducción presupuestal de cuatro mil millones de pesos al estado, el rector indicó que todos deben de presionar para evitar la disminución, incluso señaló que él por su parte ya realiza los cabildeos necesarios ante la Comisión de Educación del Congreso de la Unión para que, principalmente, no afecten el presupuesto destinado a la UAG.
Y es que dijo que si a la UAG se le reduce el presupuesto no podrá llevar a cabo las obras de infraestructura y de equipamiento que están programados, además de que no podrá ampliar la cobertura: “si la federación nos recorta los recursos para educación no sé cómo le vamos a hacer pues si se realmente se aplica vamos a tener más jóvenes en la calle sin empleo.
Por este motivo, destacó, los rectores de todas las Universidades del país se unieron para exigirle a los diputados federales que modifiquen el presupuesto enviado por el gobierno de la República para que se atiendan las necesidades sociales.
En cuanto a los “rechazados” que se encuentran en huelga de hambre frente a las oficinas de Rectoría, Villegas Arrizón reiteró que no es posible abrirles espacio en la Unidad Académica de Medicina, porque no puede poner en riesgo la acreditación de su programa educativo.
Es más, dijo que este movimiento tiene más tintes políticos que de otra naturaleza pues los jóvenes “rechazados” que están en huelga de hambre rechazaron una beca del cien por ciento para estudiar en el Instituto Hipócrates.
“Este movimiento es político; estos muchachos están movidos políticamente por un grupo de maestros para exigir recategorizaciones. Detrás de ellos está la corriente denominada MASAS, que dirige un catedrático de Ciencias Sociales, y también el dirigente del STAUAG, Anselmo Sotelo”, expresó.
Cabe hacer notar que para analizar la solicitud de ingreso de los “rechazados”, el pasado 13 de octubre sesionó el Consejo Académico de la Unidad de Medicina, el cual finalmente determinó que “si se acepta la presión política como recurso para el ingreso, estamos condenados a aceptar ese medio para el ingreso y, seguramente, el año próximo se iría a la huelga otro grupo, al fin y al cabo se puede ingresar por este medio”.
En un oficio dirigido a los representantes de los huelguistas de hambre, los consejeros académicos de la Unidad de Medicina de la UAG les reiteran que no es la presión política el medio para el ingreso a esa escuela sino que son los criterios que deben prevalecer. (Baltazar Jiménez Rosales)
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