Invidente solicita ayuda al gobernador Aguirre

Con una peculiar protesta, tendido de cara al cielo y con los brazos y piernas extendidos, justo a un costado del asta bandera de la plaza cívica Vicente Guerrero del palacio de Gobierno, un invidente demandó al gobierno estatal apoyo económico que le permita ser revisado por un especialista, ya que a pesar de que en
el pasado le diagnosticaron como inoperable su enfermedad, en los últimos meses ha tenido síntomas que podrían cambiar esta situación.
Silvestre Rodríguez es el invidente que, para mantener a su familia se dedica a la venta de periódico y chicles, se manifestó también para demandar apoyo que le permita concluir con la construcción de su vivienda en la que habita en compañía de su esposa y tres menores hijas.
Sobre su enfermedad indicó que su ceguera es total y todo es oscuridad, sin embargo en los últimos meces ha tenido una especie brillos momentáneos que le hacen ver todo blanco, “esos síntomas pueden ser dos cosas uno que mi enfermedad haya cambiado por un milagro de Dios y se convierta en operable, o la contraparte que se haya complicado más y me esté afectando alguna parte del cerebro”.
Por ello demandó ser canalizado a una institución especialista en la que se revise el estado en que se encuentra y en caso de que sea posible regresarle la vista a través de una intervención quirúrgica se le practique.
Asimismo pidió que le apoyen para concluir la construcción de su casa a la que le faltan dos paredes y la lámina, ya que eso le daría seguridad a su esposa y sus tres menores hijas, “no es mucho lo que pido, ya tengo una parte de la casa, que he construido con mucho esfuerzo y por ello le pido ayuda al gobernador Ángel Aguirre, yo me mantengo de mi trabajo, de mi venta que hago todos los días, y sólo necesito un poco para mejorar la calidad de vida a mis hijas”.
Luego de permanecer un rato tendido en la explanada, expuesto directamente a los rallos del sol, personal de la secretaría de Desarrollo social se presentó para ofrecerle revisar su situación y apoyarlo en lo que sea posible. (Abel Miranda Ayala)