Tras 48 horas de cautiverio, liberaron ayer al párroco del Santuario de Tixtla

Tras permanecer 48 horas en calidad de desaparecido, ayer regresó, sano y salvo, a la parroquia del Santuario de la Natividad en la ciudad de Tixtla el sacerdote, Edmundo Estrada Casiano, quien confirmó que fue obligado a trasladarse a Chilpancingo y encerrarse en un hotel desde donde tenía que
hablar a su familia y otros sacerdotes para pedirles que siguieran las instrucciones de unos delincuentes.
El religioso se presentó ayer a la Fiscalía especializada en atención de delitos graves para presentar una denuncia de hechos, por la extorsión de que fue objeto.
El presbítero, Edmundo Estrada, indicó que la tarde del martes recibió llamadas en las que lo amenazaron y le indicaron que tenía que salir de su parroquia y trasladarse a Chilpancingo “pues dijeron que realizarían una revisión y querían evitar que se produjeran incidentes”.
Ya estando en Chilpancingo vía telefónica se le indicó que se metiera en un hotel de esta ciudad y ahí vía telefónica estaba recibiendo instrucciones de que hacer, “me dijeron llámale a tal sacerdote, luego llámale a tu familia y la instrucción fue que le dijera que estaba bien, y que siguieran al pié de la letras las instrucciones que les darían ellos”.
Ayer alrededor de las dos de la tarde el sacerdote recobró su libertad y después de dialogar con el obispo, Alejo Zavala Castro, se trasladó a las instalaciones de la Fiscalía especial para la atención de delitos graves a presentar una denuncia de hechos en la que se asentó la declaración de todo lo que vivió.
Durante su comparecencia ante la autoridad ministerial, el cura estuvo acompañado por el obispo, Alejo Zavala Castro y el Subsecretario de Asuntos Religiosos del gobierno estatal, Javier Bataz Benítez.
Entrevistado sobre este hecho, el obispo, Zavala Castro, confirmó que los delincuentes le llamaron en varias ocasiones, durante el plagio del cura, sin embargo no quiso informar que fue lo que le pidieron, sólo agradeció que su compañero se encuentre bien de salud, y esté de regreso.
Indicó que en los siguientes días tendrá diálogo con él para ver que se hace en torno a su asignación, pues si él considera que por su propia seguridad es mejor que se le asigne una nueva parroquia se hará, “eso es algo que vamos a analizar y en su momento lo definiremos”.
Cabe señalar que en la ciudad de Tixtla el pasado miércoles y ayer jueves, se realizaron jornadas de oración entre feligreses para pedir por el regreso sano y salvo de su sacerdote.
Edmundo Estrada Casiano, es originario de Atenango del Río, se ordenó sacerdote en 1978, y desde el año 2002 funge como párroco del Santuario de la Virgen de la Natividad, en Tixtla. (Abel Miranda Ayala)