Sólo el susto se llevó al atropellar a un caballo, en el encauzamiento
El susto de su vida se llevó Arturo Bello Campos luego que la tarde de ayer al circulaba a bordo de su vehículo sobre el encauzamiento del río Huacapa se impactó contra un caballo y aunque no resultó lesionado, los daños materiales a su vehículo son de aproximadamente 10 mil pesos.
Arturo Bello, de 26 años de edad, tiene su domicilio en el andador número 2 edificio “A”, departamento 11 del fraccionamiento Santa Rosa de esta ciudad y el día lunes, cerca de las 14:00 horas manejaba su vehículo de la marca Volkswagen tipo Jetta con placas de circulación HEL-17-88 del estado de Guerrero.
Al circular sobre el encauzamiento Río Huacapa en el carril de sur-norte, a la altura del Fraccionamiento Villas del Colibrí, una manada de caballos salió de repente de un atajo y no pudo evitar atropellar a uno.
El animal al ser arrollado “voló” por los aires y finalmente cayó encima del parabrisas, el cual hizo añicos además de que abolló todo el cofre.
A pesar de eso, el caballo se incorporó y aunque rengueando se metió a los terrenos que se encuentran cerca de ahí.
Mientras al lugar del accidente llegaron paramédicos de Protección Civil para brindarle los primeros auxilios —a Arturo, no al caballo—, pero debido a que no estaba lesionado no fue necesario que fuera canalizado en ningún hospital. (Colaboración de Toño Cantú)
Arturo Bello, de 26 años de edad, tiene su domicilio en el andador número 2 edificio “A”, departamento 11 del fraccionamiento Santa Rosa de esta ciudad y el día lunes, cerca de las 14:00 horas manejaba su vehículo de la marca Volkswagen tipo Jetta con placas de circulación HEL-17-88 del estado de Guerrero.
Al circular sobre el encauzamiento Río Huacapa en el carril de sur-norte, a la altura del Fraccionamiento Villas del Colibrí, una manada de caballos salió de repente de un atajo y no pudo evitar atropellar a uno.
El animal al ser arrollado “voló” por los aires y finalmente cayó encima del parabrisas, el cual hizo añicos además de que abolló todo el cofre.
A pesar de eso, el caballo se incorporó y aunque rengueando se metió a los terrenos que se encuentran cerca de ahí.
Mientras al lugar del accidente llegaron paramédicos de Protección Civil para brindarle los primeros auxilios —a Arturo, no al caballo—, pero debido a que no estaba lesionado no fue necesario que fuera canalizado en ningún hospital. (Colaboración de Toño Cantú)
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