Perredistas de Alcozauca y su alcalde se acusan mutuamente de agresiones

En demanda de obras, campesinos del municipio de Alcozauca se enfrentaron ayer con policías municipales y personal de seguridad del alcalde perredista, Julio César Salmerón Salazar, dejando un saldo de al menos 12 personas heridas.

Por su parte, el alcalde Salmerón Salazar aseguró que el grupo de inconformes lo atacaron a balazos a él y a su familia la noche del miércoles, sin que se registraran víctimas y denunció que además los rijosos pretendieron ultrajar a su hermana Yoselín Salmerón.
En base a un comunicado de los supuestos trabajadores del campo, “el miércoles a las diez de la mañana campesinos de 11 comunidades pertenecientes de Alcozauca solicitaron audiencia con el presidente para atender lo relacionado con las obras públicas que han solicitado y que no se han realizado, así como otras obras que se encuentran inconclusas”.
Se añade en el boletín que los campesinos no fueron recibidos por el alcalde, “quien se encontraba en una fiesta de bautizo, por lo que hasta dos horas después llegó al palacio municipal acompañado de sus elementos de seguridad, quienes con pistolas en la mano intentaron disuadir a las autoridades y ciudadanos de las comunidades inconformes. El saldo de esta confrontación fue de una decena de campesinos lesionados”.
Ante ello, se señala que “los representantes de las comunidades decidieron tomar el palacio municipal y aproximadamente a las diez de la noche el presidente municipal y cuatro personas que iban armadas con rifles, de nueva cuenta hicieron acto de presencia en el ayuntamiento e intentaron desalojar a los manifestantes haciendo disparos al aire. De estos hechos, resultaron tres personas lesionadas”, indica el comunicado.
Los manifestantes responsabilizaron de los hechos violentos además del alcalde y la policía local al subsecretario de Asuntos Políticos del Gobierno del Estado, Víctor Aguirre Alcaide, quien se habría negado a ser mediador para que se instalara una mesa de diálogo.
Ante los hechos los manifestantes han incluido en su pliego petitorio la destitución del alcalde por los actos de agresión y de violaciones a los derechos humanos, además de la presunción de mal manejo de los recursos públicos pues no se han ejecutado las obras programadas con tales fondos.
Afirman que a las 11 y media de la noche ocurrió “la segunda agresión física y el intento de homicidio, pues nuevamente el presidente municipal se presentó en el edificio en estado de ebriedad con otro grupo de golpeadores, estos con pistola en mano y un cuerno de chivo dispararon en dirección en donde se encontraban nuestros compañeros agrediendo nuevamente a los presentes resultando lesionados de gravedad al ser golpeados con las cachas de las pistolas que portaban los agresores. De igual manera el presidente municipal y el grupo de pistoleros, encargados de su seguridad amenazaron de muerte a los asistentes”.
Añaden que en ningún momento privaron de la libertad a algún trabajador o funcionario del ayuntamiento “y por eso hacemos responsable a Julio César Salmerón Salazar de cualquier agresión, recordamos también nuestra exigencia por servicios y obras públicas para el bienestar de nuestras comunidades”.
No obstante vía telefónica el alcalde Salmerón Salazar señaló que cuando se dirigía caminando a su domicilio particular ubicado en el centro de la ciudad, muy cerca del ayuntamiento poco después de las diez de la noche, le comenzaron a disparar, “primero me insultaron, después me dispararon, venía con toda mi familia y tuvimos que correr a mi domicilio”. Dijo que el grupo armado los siguió y abrieron fuego contra la vivienda, además de que quebraron las ventanas y espejos de las camionetas que estaban frente a su morada.
El alcalde responsabilizó a los dirigentes perredistas, Juan Gaspar Vega y Baltasar Jerónimo Jacinto porque “no les hemos cumplido el capricho de darles dinero de manera personal”. (Abel Miranda Ayala)