Otras 15 familias que residen en zonas de alto riesgo solicitan ser reubicadas

La síndica procuradora del municipio de Chilpancingo, Socorro Mondragón Sosa, aseguró que podrían ser más de 50 familias que habitan en zonas de alto riesgo las que sean reubicadas, bajo el mecanismo que se utilizó para los precaristas de la barranca “La Lobera” que la semana pasada iniciaron la construcción de sus
viviendas en un predio seguro, pues en los últimos días han llegado de varias zonas de la ciudad a solicitar apoyo similar.
Dijo que el mecanismo usado en la barranca la Lobera consiste primero en que el ayuntamiento contactó con el propietario de un terreno al poniente de la capital, en el que podrían construirse al menos 500 casas, y acordó con él, que se otorgarían facilidades y un buen precio para quienes habitan zonas de alto riesgo y quieran ser reubicados, de tal forma que a pesar de estar valuados entre 70 u 80 mil pesos los terrenos por la zona y el tamaño se los ofrecieron en 40 mil pesos, de los que el ayuntamiento cubre los primeros dos mil.
Adicionalmente se les apoyó con el traslado de las viviendas, y se acercó a la gente con proveedores de materiales que están dando material a precios accesibles.
La siguiente parte del acuerdo fue garantizar que el terreno que se está dejando no será habitando nuevamente, para eso se firmó una carta en la que la familia reubicada tendrá que reforestar el terreno y estar al pendiente de él, así se garantiza que no se meterá otra familia, y que ellos siguen teniendo los derechos que se hubieran acumulado en este tiempo, es decir que si siembran árboles frutales podrán gozar de los frutos.
Inicialmente el acuerdo fue con 12 familias que fueron las más afectadas con las lluvias de hace dos semanas y que incluso hubo necesidad de albergarlas temporalmente en las instalaciones de la Secundaria Técnica número 150, pero a raíz de que esto se conoció a través de los medios de comunicación, otras 15 familias de la misma barranca pero de la zona de enfrente, fueron a solicitar que se les incluya en el proceso de reubicación.
“Y es que el precio es relativamente barato, y pagarán sólo 800 pesos al mes, y al final tendrán sus escrituras, el terreno está en una zona donde hay facilidades para acceder al agua, y la electrificación está a tan sólo unos 100 metros, entonces es una garantía de que estarán mejor y con mayor seguridad”.
Las solicitudes que ha recibido la síndica son también de habitantes de otras barrancas, todas las solicitudes se están analizando y se iniciará por las que tengan un mayor riesgo, y hasta donde el propietario del terreno acepte las condiciones y especialmente siempre y cuando los que se desalojen garanticen que ese espacio no volverá a ser ocupado. (Abel Miranda Ayala)