LAS COSAS COMO SON…

Por Tomás Benítez Cano

NOMBRES SOBRAN, PERO ¿CUALES SERAN LAS BANDERAS?

Aunque la calentura política ya invadió en Guerrero a todos los partidos, ha sido en el de la Revolución Democrática donde la graduación ha incrementado considerablemente en los últimos días. Por ejemplo, el dirigente municipal del sol azteca en Chilpancingo, Julio César Aguirre Méndez, ya puso hasta fecha para
abordar el tema de la candidatura a la presidencia municipal de la capital, mientras que los diputados Celestino Cesáreo y Sebastián de la Rosa, que quieren ser candidatos a senadores, intensificaron su proselitismo abierto y encubierto.
Son docenas de perredistas adelantados, en proselitismo no en conocimientos, quienes buscan y se mueven para que a toda costa sus nombres y fotos se empiecen a manejar en los medios de comunicación y en otros productos propagandísticos, en un mensaje directo tanto a la dirigencia de su partido como a los ciudadanos guerrerenses de que aspiran a un cargo de representación popular.
Aunque los tenemos bien identificados y enlistados, como a los 12 funcionarios de la Secretaría de Desarrollo Rural que quieren convertirse en senadores, diputados federales, diputados locales o presidentes municipales, para esta entrega no son tan importantes sus nombres y apellidos, sino el qué le ofrecerán a los guerrerenses para que voten por el PRD, independientemente de quienes sean los abanderados.
Por supuesto que no soslayamos la importancia y el peso que en estos tiempos y en lugares específicos tiene el nombre y la reputación del contendiente, a lo que nos estamos refiriendo es a la oferta política que como partido le ofrecerán a los guerrerenses, sobre todo cuando ya hubo un gobierno del estado perredista que sirvió para maldita la cosa, y que por su culpa, al menos ese es el pretexto, la actual administración, también perredista, no está dando los resultados que se esperaban, cuando menos hasta ahora.
Antes, el PRD, conociendo el talón de Aquiles del PRI, sobre ofertaba el combate a la corrupción, bandera que en la actualidad sería contraproducente por el escandaloso desfalco de las finanzas públicas que dejó Zeferino y sus secuaces. Ni una genialidad cambiaría la percepción que tienen los guerrerenses del sexenio pasado, sobre todo porque los actuales gobernantes contribuyeron a que se acentuara esa creencia y se acrecentara el morbo.
¿O, a caso, los perredistas van a ofertar que, a diferencia del pasado, ahora sí se castigó a los saqueadores, cuándo hasta la fecha no ha caído ninguno a la cárcel? ¿O le podrán vender la idea a los surianos de que ahora que tenían control del Congreso se hicieron realidad las denuncias de juicio político o las inhabilitaciones en contra de los ex presidentes municipales corruptos? ¿O que ahora que tienen la Procuraduría de Justicia ya hicieron válidas las órdenes de aprehensión en contra de los bandidos del dinero del pueblo?
Tampoco creemos que los perredistas tengan un espíritu suicida y se atrevan a ofertar seguridad pública, cuando los guerrerenses sabemos que desde que son gobierno en Guerrero, todos los días se registran múltiples asesinatos en casi toda la geografía guerrerense. En esta materia ¿qué le ofrecerían a miles de familias dolidas por la pérdida de algún ser querido o de su patrimonio?
Seguramente pensarán en la generación de empleos, pero el asunto no será tan creíble porque éstos los crean las grandes inversiones como La Parota y la explotación minera, que son precisamente a las que han combatido. Los perredistas podrán argumentar que se pueden crear fuentes de empleo a través de proyectos productivos, y es verdad, sólo que la mayoría de éstos los trae el gobierno federal y su manipulación correrá a cargo de los panistas.
El rubro de la salud mejor que ni lo toquen porque el efecto o impacto será fatal, ya que la carencia de ese servicio lo padecen todos los días miles y miles de guerrerenses y les cala profundamente.
Obligado por la falta de espacio, concluimos: Debido a las condiciones de pobreza, inseguridad, saqueo de los recursos públicos y carencia de servicios básicos como la salud, así como otras omisiones en las que ha caído el PRD, sobre todo en el Congreso local, necesitará contratar a verdaderos genios del marketing político para poder penetrar en las preferencias de los guerrerenses. Y como el panorama no es tan favorable, muchos ya se están adelantando para agandallarse los cargos de representación proporcional o plurinominales, y esa actitud la están asumiendo, sobre todo, los miembros de las corrientes que tienen el control del partido y que son mayoritarias, como el Grupo Guerrero.