Arraigan otros seis presuntos integrantes de “La Barredora”

*Ayer los presentó la PGJE en conferencia de prensa

*Igual que a los otros 10 les imputan infinidad de delitos

*Hay confesiones pero falta fortalecerlas con evidencias

Abel Miranda Ayala

Seis miembros de la organización delictiva conocida como “La Barredora”, que opera en el puerto de Acapulco y a los que se les atribuyen decenas de asesinatos, robos, secuestros, extorsiones y muchos otros delitos, fueron presentados ayer a los medios de comunicación en las instalaciones de la Procuraduría General
de Justicia del Estado.
Los detenidos fueron capturados la semana pasada en acciones coordinadas del Ejército, policía Federal, policía Estatal y Ministerial, quienes implementaron trabajo de inteligencia derivado de otra serie de detenciones, de individuos que revelaron la ubicación de casas de seguridad y nombres de los integrantes de esta estructura delictiva.
A los detenidos se les aseguraron una pistola calibre .25, y decenas de implementos que se presume que fueron utilizados para descuartizar personas, entre estos dos machetes, varios cuchillos, un pico, al que aún se le aprecian restos de vísceras humanas, además de ropa que perteneció a los ejecutados.
De acuerdo con la información presentada por el procurador general de Justicia, al momento de la detención de estos individuos se logró liberar a dos personas que tenían secuestradas, quienes son comerciantes uno proveniente del Distrito federal y el otro de Ciudad Altamirano, y se estaba en las negociaciones con sus familiares para el pago del rescate.
“Refieren en su confesión los detenidos, que su área de operación comprende desde La Cima, Kilómetro 30 y la colonia Bonfil, y dijeron percibir pagos de mil 500 a dos mil pesos semanales por hacer labores de vigilancia en las casas de seguridad y/o fungir como halcones”.
En el comunicado que leyó el procurador se añade que “En su declaración aceptan haber participado en al mensos 8 secuestros, asimismo el homicidio y descuartizamiento de un taxista cuyos restos fueron arrojados en el puente bicentenario, a quien habrían matado porque andaba cobrando cuotas a los diferentes comercios y se hacía pasar como gente de nuestra organización".
Marco Antonio de los Ángeles Poxin reconoce su participación en el descuartizamiento de un individuo cuyos restos fueron arrojados en La Garita y La Cima, así como dos homicidios de taxistas quienes habrían sido enterrados en una casa de seguridad. Asimismo señala dedicarse a la extorsión telefónica y de manera directa a empresarios y comerciantes así como cobros de por derecho de piso y robos de autos, mismos que utilizaban para cometer secuestros.
Los detenidos son: Marco Antonio de los Ángeles Poxin alias el “Marco”, de 19 años de edad originario del puerto de Acapulco, quien declaró que dentro de la organización tenía la función de cuidar “los paquetes” que es el nombre que le asignan a las personas secuestradas; Ángel Morales Morales, alias el “Güero”, de 20 años, originario de Acapulco, quien mencionó en su declaración haber tenido la función de cuidar a los secuestrados, reconociendo el participado en varios plagios; Santiago Bello Linares alias “El Chango” de 22 años, originario de Acapulco quien reconoce que también cuidaba a las personas que tenían privadas de su libertad, y aceptado ser parte del grupo delictivo del denominado "El Comando del Diablo"; José Guadalupe Rodríguez Hernández de 22 años de edad a quien reconoció ser halcón vigilando que no llegara policía a este lugar; José Guadalupe Rodríguez Hernández de 22 años de edad originario de Acapulco Guerrero, quien fue aprehendido en la casa de seguridad, y reconoce participar en la banda con funciones de halcón; José Luis Pastrana García alias “El Toro”, de 40 años de edad, originario de San Marcos, Y Alejandro Gallegos Calderón, alias “Luna”, de 22 años de edad originario de Acapulco.
Todos ellos se encuentran relacionados con la Averiguación previa TAB/REN/06/0538/2011, por delitos de homicidio, extorsión, robo, secuestro, delincuencia organizada, y los que les resulten.
Entras los objetos que les fueron asegurados también se localizaron decenas de tarjetas de crédito, e identificaciones que pertenecen a personas que fueron plagiadas, pero cuyos nombres no se dieron a conocer.
Los detenidos fueron arraigados para que la procuraduría continúe con las pesquisas y posteriormente, cuando se tengan todos los elementos de prueba en su contra serán puestos a disposición del Ministerio Público para que este determine su situación legal y de ser procedente ejercite acción penal en su contra, consignándolos ante el juez competente.